El procesamiento de los datos de streaming supone una ventaja en la mayoría de las situaciones en las que se generan datos nuevos y dinámicos de forma constante. Es apto para la mayoría de los sectores y casos de uso de Big Data.
Por lo general, las empresas comienzan con aplicaciones sencillas, como la recopilación de registros del sistema, y el procesamiento rudimentario, como la implementación de cálculos mín.-máx. Más adelante, estas aplicaciones evolucionan y se pasa al procesamiento más sofisticado casi en tiempo real.