Apple recibió los permisos necesarios para probar su flotilla de coches autónomos en las carreteras de California, lo que supone que la iniciativa de autoconducción de la compañía de la manzana, el proyecto Titan, continúa en marcha.
El estado de California requiere que todas las empresas con vehículos autónomos se registren antes de salir a las calles, asumiendo la obligación de informar de cualquier incidente y de realizar informes públicos sobre el estado de sus pruebas, incluyendo cuántas veces tiene que tomar el control del vehículo el conductor.
De este modo, Apple se une a otros gigantes como Google y Uber, y a fabricantes de coches como Tesla y BMW, que también tienen el derecho a realizar sus pruebas.
No obstante, Uber obtuvo su permiso recientemente, después de haber rodado de manera ilegal durante varios meses.
Según publicó The Wall Street Journal, el permiso de Apple abarca tres Lexus SUV y seis conductores diferentes que deberán sentarse tras el volante para supervisar la conducción y tomar las riendas del vehículo cuando sea necesario.
El deber de informar cada suceso durante las pruebas acabará con el secretismo que ha mantenido la compañía en torno a sus productos. Además, ésta es la primera indicación pública de que el proyecto Titan se mantiene vivo.