Microsoft ha puesto a la Inteligencia Artificial (IA) como una de sus prioridades en los próximos años, dejando de lado su enfoque anterior centrado en los móviles.
En una presentación financiera emitida la semana pasada, la compañía de Redmond se refirió a AI en seis ocasiones durante el informe anual; en 2016 no lo hizo ni una vez.
“Microsoft es una empresa de tecnología cuya misión es capacitar a cada persona y cada organización en el planeta para lograr más”, afirmó la compañía. “Nos esforzamos por crear oportunidades locales, crecimiento e impacto en cada país. Nuestra estrategia es construir las mejores plataformas y servicios de productividad para una nube inteligente y un entorno inteligente dotado de inteligencia artificial “.
Junto con un enfoque más profundo en IA, el gigante de la tecnología eliminó las referencias a móviles, que había sido una promesa del CEO de Microsoft, Satya Nadella, tras su nombramiento en 2014.
“Nuestra visión estratégica es competir y crecer como una compañía de productividad y plataforma para el primer mundo móvil y primero en la nube”, según la declaración de 2016 de la compañía.
Sin embargo, en 2017 el enfoque se ha centrado en la creación de una plataforma inteligente de cloud, una plataforma capaz de atraer a una nueva generación de socios, como desarrolladores, constructores de aplicaciones y proveedores de software independientes.
En respuesta a la evolución de las formas en que los individuos y las organizaciones utilizan e interactúan con la tecnología, Microsoft tiene como objetivo aprovechar las experiencias cambiantes de los clientes, utilizando ofertas multisensoriales como la voz y las interacciones de la mirada. “Creemos que está surgiendo un nuevo paradigma tecnológico que se manifiesta a través de una nube inteligente y un borde inteligente en el que la computación está más distribuida”, aseguró la compañía.
La decisión de alejarse del móvil no es sorprendente para Microsoft, tras una serie de fallas monumentales en el espacio móvil, como lo demuestra la adquisición de Nokia en 2013.
Bajo el título de “desastre total” tanto en la tecnología como en la prensa convencional, se rumoreaba que el acuerdo estaba motivado por la envidia de Apple y Google, envidia que ahora ha dado lugar a una importante ronda de recortes de empleos, con miles procedentes de la unidad telefónica de Redmond.
Junto con el pésimo rendimiento de Windows Phone, parece que Microsoft está dispuesto a pasar del mercado móvil y centrarse en la extracción de valor a través de la IA en la nube.
James Henderson, CIO EEUU