Bajo una gran presión tras el ciberataque anunciado hace dos semanas, Equifax ha sustituido dos importantes figuras de la alta dirección: el CIO y el CSO.
La firma ha dicho a través de un comunicado oficial que David Webb, CIO, será sustituido por Mark Rohrwasser, que se incorporó a Equifax hace un año. Russ Ayres, que ha trabajado en la división TI de la compañía, sustituirá a Susan Mauldin, que ha ostentado el cargo de CSO.
La destitución de los ejecutivos es una de las consecuencias del robo de datos masivo del que fue víctima Equifax entre mayo y julio de este mismo año. Desde que se anunciara, hace dos semanas, la firma estadounidense ha ocupado las primeras planas de los principales medios de comunicación.
Aunque Equifax insisten en que el ataque no afectó a su principal activo (las bases de datos de información de créditos de clientes), se enfrenta a múltiples demandas. Las consecuencias de esta situación ya se dejan ver en los mercados en la medida que los títulos de la firma pierden valor (un 3,8% tras el anuncio de los cambios en la directiva).
No obstante es muy probable que las verdaderas consecuencias del ciberataque se dejen ver en el medio plazo. Será entonces cuando podrán evaluarse los daños a la imagen de marca de Equifax.
-IDG.es