Lo que comenzó como una tecnología cinematográfica usada en Rogue One: a Star Wars Story para insertar el rostro y la voz de Carrie Fisher en el cuerpo de la actriz Ingvild Deila, quien interpretó a la Princesa Leia, se ha convertido en una herramienta para crear videos falsos llamados deepfake.
Barack Obama y artistas como Tom Cruise son algunos de los personajes que han sido blanco de este tipo de videos, los cuales, apoyados por inteligencia artificial, utilizan los rasgos faciales de una persona a partir de una acumulación de imágenes estáticas para luego sincronizarlas con elementos de voz de esta, más la original, para crear diálogos simulados.
Para no caer en la trampa de las deepfake, Udemy compartió cinco consejos para saber si lo que ve es fake:
1) Poco o nulo parpadeo de ojos: los seres humanos parpadeamos en intervalos de dos a ocho segundos y la duración va de una décima de segundo o cuando mucho cuatro. En las deepfake los personajes parpadean poco, en períodos relativamente largos y en algunos casos no lo hacen.
2) Falta de sincronía entre la voz y los movimientos de cara, cuello y hombros: al ser hechos con imágenes estáticas animadas, el torso y el rostro no presentan coordinación, y en algunos casos, la fisionomía facial no tiene expresión, salvo la boca, la cual pareciera ser de otra persona.
3) Cambio en el color de piel, boca, dientes y lengua poco definidas, y perfil del rostro difuso: estos videos se hacen usando imágenes de un personaje en diferentes momentos, tonalidades de luz, movimientos bucales y contextos. Por tanto, los gestos no son los mismos a lo largo del video, pese a que sea la misma persona.
Para detectarlos, se recomienda descargar el video y visualizarlo a la mitad de la velocidad de reproducción habitual, con lo que podrá ver como la imagen del personaje se distorsiona o se “desdobla” en diferentes imágenes sobre las cuales se editó.
4) Los videos son cortos: generalmente no son de más de un minuto de duración, la razón es que hacerlo de más tiempo abre la posibilidad de que se vean elementos visuales que se quieren ocultar debido a que la tecnología todavía no logra hacer simulaciones casi perfectas.
5) Cerciórese que la fuente sea confiable: tome el tiempo de buscar el video en cuestión en algún sitio de noticias o información que considere confiable, si no lo encuentra ahí, lo más probable es que sea falso. También indague más de la fuente que lo publicó, usualmente se trata de cuentas, sitios o personas que no tienen un perfil con información que los identifique.
Y, por último, pero no menos importante, tiene que estar dispuesto a sospechar, tener una mirada crítica al contenido que consume, y si detecta una deepfake no compartirla.
-Federico Garay, instructor Udemy y experto en producción de video