Son cada vez más las empresas industriales que encuentran en la tecnología del Internet de las Cosas (IoT) la solución para mejorar sus sistemas de producción. Una de las áreas en las que más se están empleando estas herramientas es la de Prevención de Riesgos Laborales, cuyos responsables buscan soluciones innovadoras para reducir los accidentes en el trabajo.
Las compañías encuentran varios problemas en el día a día, entre ellos el de impedir que los trabajadores entren en zonas no autorizadas. Las barreras físicas son una solución, especialmente en aquellas zonas de la empresa donde más se presenta esta problemática.
El reto pasa también por utilizar sistemas de localización de los trabajadores, de forma que si acceden a una zona no permitida se notifique al responsable y al propio empleado para evitar riesgos.
Qué es y cómo se realiza la localización indoor
La localización indoor es una práctica cada vez más consolidada. El mercado ofrece soluciones basadas en algoritmos que juegan con ángulos de llegada y salida que alcanzan una precisión de hasta 50 centímetros.
Esta técnica requiere de la distribución de puertas de enlace y localizadores en toda la infraestructura de la empresa para aplicar el algoritmo de la mejor manera posible. En función del número de localizadores y puertas de enlace, la precisión puede aumentar o reducirse.
Los activos a monitorear requieren una sola antena, pueden ser de baja potencia y utilizan la transmisión BLE (Bluetooth de baja energía).
Los localizadores requieren arreglos de antenas de 3 x 3 o 4 x 4.
Los Gateways (Edge Computing) procesan las lecturas de ángulo y las envían al sistema de monitoreo de activos en la nube para determinar su ubicación.
En el caso de las tecnologías que se basan en la fuerza de la señal (RSSI), la precisión disminuye considerablemente y depende mucho más del entorno en el que se coloca. La mejor solución es el BLE, tanto por costo como por difusión (por ejemplo, cada smartphone tiene un BLE ya instalado).
Todos los empleados necesitarán tener un pequeño dispositivo (de un tamaño de 10 x 10 cm como máximo), que pueden llevar incorporado a la altura del cinturón, y que integra un sensor acelerómetro. Por un lado, este sensor reduce el consumo de batería, ya que si la persona está parada, deja de transmitir la señal de localización. Por otro, puede detectar el “hombre en el suelo”, por lo que, combinando ambas informaciones, es posible intervenir inmediatamente y minimizar los accidentes.
Los sistemas para aumentar la seguridad de los trabajadores
Existen varios sistemas para mejorar y vigilar la seguridad de los empleados en las industrias. Además de detectar al “hombre en el suelo”, es posible emplear prendas especiales que rastreen la información vital del trabajador. Esto no sólo incluye el latido del corazón, algo que también puede ser detectado por un smartwatch, sino también el volumen de aire respirado y su frecuencia.
En la industria, una de las principales causas de accidente laboral es la colisión entre el hombre y la máquina. Como hemos visto al principio de este artículo, inhibir el acceso a ciertas áreas puede resultar benéfico, pero al conectar las máquinas con la tecnología IoT, se contribuye a reducir las lesiones. Esa localización puede aplicarse también a máquinas como montacargas o grúas puente, que pueden parar a tiempo y evitar un accidente gracias a los sensores.
Cómo los sistemas wearables pueden contribuir a la seguridad en el lugar de trabajo
La aplicación de sistemas wearable contribuye a la protección individual en el trabajo (PPE). Para los RSPP de una empresa, el control es fundamental y hasta ahora solamente se abordaba a través de técnicas visuales.
La tecnología IoT puede automatizar estas comprobaciones aplicando, por ejemplo, pequeñas balizas BLE asociadas al smartphone del trabajador o a dispositivos creados a tal efecto. Por lo tanto, si un empleado no usa EPP, a través del teléfono o dispositivo inteligente, será posible que un RSPP lo identifique y pueda tomar medidas.
Los wearables también son importantes a la hora de controlar los factores relacionados con el medioambiente.
Por vigilancia medioambiental entendemos el control de la presencia de gases o la medición de la temperatura exterior, con el fin de hacer posible la intervención inmediata si un empleado se ve expuesto a agentes químicos imprevistos. La combinación de estos sensores con el control de los datos vitales del trabajador puede resultar clave para salvar vidas.
Sin embargo, el uso de los wearables plantea un problema para la gestión de los datos sensibles de los empleados, por lo que las empresas que quieren usarlos deben compartirlos con los trabajadores. La prioridad es la mejora de la seguridad, pero el empleador debe tomar las medidas de confidencialidad absoluta necesarias y dar a los datos un uso estrictamente relacionado con la seguridad laboral.
De los wearables a la realidad aumentada
En términos de seguridad, la frontera de los wearables es el uso de la realidad aumentada, una técnica que las empresas están comenzando a adoptar para diversos propósitos. Un técnico que lleva gafas de realidad aumentada puede ser advertido de las protecciones necesarias antes de comenzar a usar una máquina o puede ser alertado con antelación de la prohibición de acceder a una zona restringida.
Hasta la fecha, el límite para el uso de la tecnología reside en su capacidad de uso y también en la resistencia al cambio por parte de los empleados. En conclusión, las tecnologías IoT pueden aportar amplios beneficios en términos de seguridad. Es muy probable que en los próximos años se generalice su uso y que las empresas, y sobre todo los trabajadores, vean una reducción sustancial de los accidentes laborales.
Carlos Botta, IoT Business Developer de everis Italia.