La disponibilidad de una vacuna contra el coronavirus ha creado gran expectativa alrededor de asegurar la salud de la gente y poner fin a una crisis que provocó cambios radicales a escala global. Al mismo tiempo, su distribución en todo el mundo plantea un gran desafío: contar con una cadena de frío que pueda soportar el transporte y almacenamiento de la vacuna, que en algunos casos debe hacerse entre -70C° y -80C°.
Mariano de Leonardo, director de Consultoría Estratégica de Minsait, una compañía de Indra, aseguró que este hecho enfatiza la relevancia de una cadena de frío altamente efectiva dentro de todo proceso logístico. “Si bien es cierto que la vacuna COVID-19 trajo a la mesa el tema, también lo es que el traslado de insumos perecederos –desde que salen de la planta de producción, se almacenan, se transportan, hasta que se distribuyen y llegan al consumidor final- se disparó durante la pandemia y también puso en la mira los procesos involucrados en la cadena de frío y la manera en la que estos son implementados por parte del personal”.
En primer lugar, la cadena de frío requiere una infraestructura integral que cumpla con las regulaciones vigentes y los controles de calidad para lograr la trazabilidad de la temperatura a lo largo del trayecto. Esto es crítico para demostrar que los productos se mantuvieron a la temperatura adecuada en todo momento. Aunado a ello está la capacitación del personal, factor clave en la cadena de frío.
En ese sentido, la consultoría y la tecnología son dos componentes que contribuyen significativamente a la eficiencia y la trazabilidad necesarias de las cadenas de frío regionales y globales, expresó Mariano de Leonardo, quien explicó que específicamente, la primera se enfoca en resolver un problema de negocio, a partir de una sinergia y comunicación constante entre el integrador o consultor y la organización. Por su parte, la tecnología es la que echa a andar los engranajes logísticos.
La tecnología en la mejora de la cadena de frío
La tecnología ha influido de manera importante en la evolución de las cadenas de frío. Como un componente altamente crítico, tanto en el back-end como en el front-end, brinda los medios para la recolección de datos y la generación de reportes en tiempo real que permiten tener una vista completa de lo que sucede en ambos extremos de la cadena.
“Tecnologías como el Internet de las Cosas (IoT), la inteligencia artificial (IA), blockchain, la ciberseguridad, la analítica y la robótica son cruciales para conformar una red de suministro digital integrada. A estas se suman innovaciones como sensores y sistemas de posicionamiento global (GPS), que ayudan a conformar un mapa mucho más preciso de condiciones presentes en cada uno de los eslabones”, informó Mariano de Leonardo.
La preservación de la cadena de frío es un proceso delicado que necesita tecnología de punta, materiales de calidad y la asesoría de expertos. Asimismo, a través del aprovechamiento de estas tecnologías, es posible lograr ahorros en combustible y reducir las emisiones a la atmósfera.
De acuerdo con Mariano de Leonardo, a lo largo de su evolución, las cadenas de frío se han enfrentado a importantes desafíos. Hoy deben ayudar a llevar la vacuna contra el COVID-19 a todos los rincones del planeta, pero también seguir garantizando el abasto de alimentos y bebidas, pese a los fenómenos económicos, sanitarios y climáticos que pudieran surgir.
“Hoy que la cadena de frío debe enfrentar el desafío de garantizar la conservación y distribución de un fármaco clave para la humanidad, es de vital importancia que los responsables del área de Supply Chain busquen aliados expertos en el tema. El objetivo no solo será la implementación de lo último en tecnología para la cadena de frío, sino el acompañamiento de consultores que hayan participado en proyectos similares”, expresó el directivo.
Para el 2021, un año probablemente igual de desafiante que el año que se va, las empresas especializadas en TI irán un paso más en la identificación de las necesidades y los problemas de negocio dentro de la cadena de frío, así como de la integración de tecnologías e innovaciones que ayudarán a las organizaciones a integrar cadenas de frío altamente eficaces.