Las stablecoins, también conocidas como monedas estables, son un tipo de criptomoneda cuyo valor está ligado al precio de las monedas fiduciarias e incluso el oro. Estas se dividen en tres categorías: en primer lugar, están aquellas respaldadas por divisas oficiales, cuyo valor equivale a monedas como el dólar o el euro. En segundo lugar, se encuentran aquellas que están ligadas a otra criptomoneda, como DAI, que utiliza otros criptoactivos como respaldo para garantizar asegurar que su precio se aproxime a USD; y por último, están las respaldadas por otros bienes, como Pax Gold, que representan un gramo de oro físico.
En 2014 se creó la primera stablecoin: el USD Tether, con el propósito de combinar las ventajas de una criptomoneda con la estabilidad que diera alternativas al mercado. Desde entonces, han surgido diversos proyectos de stablecoin, cada uno con su metodología única, pero siempre guardando la premisa de mantener un valor estable, convirtiéndose en una alternativa para quienes desean proteger su dinero de los efectos de la inflación y comenzar a operar con activos digitales con facilidad y rapidez.
‘’En Bitso hemos observado un aumento en la adquisición de stablecoins, vinculadas a monedas fiduciarias, en el último año. Este fenómeno lo relacionamos con la creciente necesidad de la comunidad latinoamericana de protegerse contra la inflación. La facilidad para adquirir y utilizar este tipo de activos está contribuyendo a democratizar el acceso a una variedad de servicios nacionales e internacionales que previamente tenían barreras en algunos territorios”, comentó Andrés Salcedo, Líder de Cripto en Bitso.
Para el cierre de 2023, se estima que habrá alrededor de 99 stablecoins en circulación. De estas, seis se han convertido en las opciones más populares entre las personas de Latinoamérica para preservar el valor de sus fondos, frente a la volatilidad de las divisas locales y acceder a servicios financieros globales.
USD Stablecoin (USD): Esta moneda estable, también conocida como dólares digitales, está vinculada al valor del dólar estadounidense.
EUR stablecoins (EUR): Está compuesta por Euro Coin (EUROC), una moneda digital cuyo valor tiene una relación de uno a uno con el euro y está 100% respaldada por euros físicos almacenados en cuentas bancarias.
Pax Gold: Es una criptomoneda que está respaldada por las reservas de oro reales de Paxos, una empresa con ánimo de lucro de Nueva York.
Tether USD (USDT): Es una de las stablecoins más extendidas en el criptomercado. Su precio está vinculado al dólar estadounidense en una relación de uno a uno.
DAI: Utiliza otros criptoactivos como respaldo para garantizar sus operaciones, además de usar su propio mecanismo para asegurar que su precio se aproxime a 1 USD.
True USD (TUSD): Es un token, ya que no tiene su propia red blockchain, sino que se basa en la de Ethereum. Su valor tiene paridad con el dólar estadounidense.
La creciente inclinación hacia las stablecoins revela la capacidad de adaptación de los mercados latinoamericanos a entornos financieros cada vez más digitales y globalizados. Este cambio de tendencia sugiere que los inversionistas ven en las monedas digitales una herramienta para enfrentar la depreciación de las monedas locales, aprovechando al mismo tiempo las oportunidades ofrecidas por el ecosistema de criptomonedas. Esta evolución refleja una transformación sustancial en la forma en que la comunidad latinoamericana se relaciona con el sistema financiero y elimina barreras de acceso a dinámicas globales.