Las organizaciones y los mercados en general enfrentan la necesidad de redefinir sus estrategias para mejorar su productividad y mantener su competitividad, especialmente, tras los nuevos desafíos y paradigmas post pandemia. En este contexto, Fernando Gastron, director general de Ecosistemas, implementó una nueva metodología de trabajo que llamó “Células de trabajo con Inteligencia Artificial”, que no sólo impulsa la eficiencia interna, sino que redefine la manera en que se brindan servicios a clientes y se colabora entre equipos.
“Esta nueva metodología radica en la implementación de células de trabajo con Inteligencia Artificial, un enfoque que permite mejorar la comunicación y la productividad entre los grupos de trabajo. Esta estructura modular busca ser un catalizador para la eficiencia, permitiendo una mayor agilidad y sinergia entre los colaboradores, lo que se traduce directamente en servicios más eficientes y personalizados para los clientes”, aseveró Fernando Gastron.
La productividad aumenta exponencialmente, reflejándose no sólo en números, sino en un ambiente laboral más motivador y colaborativo. La adopción de células de trabajo es una estrategia efectiva para reducir la tasa de rotación de personal, ya que los empleados se sienten más conectados y comprometidos con sus equipos y objetivos.
“Mediante la aplicación de indicadores clave de rendimiento (KPI) a nivel diario, se pueden anticipar y superar obstáculos de manera eficiente, lo que ha contribuido a alcanzar mejores resultados en un lapso reducido. Esta estrategia mejora la satisfacción de los clientes y genera una mayor motivación entre los Ejecutivos Comerciales y reclutadores”, aseguró Fernando Gastron.
El enfoque de células de trabajo mejora la eficiencia operativa y fortalece la cultura organizacional. La colaboración interdisciplinaria se ha convertido en la norma, fomentando la creatividad y la innovación en la resolución de problemas. Los empleados se sienten parte integral de un ecosistema empresarial que valora sus contribuciones individuales y colectivas.
“En este momento de disrupción, la metodología de Células de trabajo con Inteligencia Artificial de Ecosistemas no solo representa una respuesta adecuada a los desafíos del mercado, sino que se erige como un modelo a seguir para otras organizaciones que buscan adaptarse y prosperar en un entorno cambiante. La dirección visionaria de la empresa ha sentado las bases para un futuro sostenible, donde la productividad y la eficiencia no solo son metas alcanzables, sino componentes esenciales para la supervivencia y el éxito empresarial”, finalizó Gastron.