El 2009 fue un año especialmente complicado para General Motors, firma que en junio de ese año se declarara en banca rota y que reconociera una deuda superior a los $121 mil millones de dólares. Tras recibir un apoyo gubernamental valorado en $50 mil millones de dólares, GM vuelve al carril del crecimiento.
En el camino, GM ha tenido que hacer cambios definitivos para ser una empresa sana y salir avante de los tiempos difíciles. “2009 fue un año de transformación para General Motors”, afirma Michael Khan, CIO. “Fue un año duro para la compañía en general y para TI en particular. No obstante, hoy podemos decir que estamos abiertos al negocio y listos para ser una empresa saludable otra vez”.
En este proceso, la TI jugó un rol definitivo a escala global y local. En lo que a México corresponde, Kahn asumió la dirección de Sistemas de Información de la subsidiaria en el país para dirigir una reinvención a fondo.
La reinvención consistió en conformar un equipo de trabajo totalmente nuevo, así como una nueva cultura y forma de trabajar. “Al mismo tiempo, buscamos mantener nuestras operaciones en línea, ejecutando y manteniendo proyectos, y apoyando en el lanzamiento de nuevos productos”, detalla. No obstante, la conformación del nuevo equipo de trabajo también implicó reducir el número de integrantes, algo que no fue fácil de ejecutar, reconoce.
Asimismo, destacó algunos de los cambios clave al interior de TI. Por un lado, afirma, se dio el salto de un modelo distribuido a uno central. Por otro lado, se alineó la TI con el negocio de forma “mucho más limpia”, como él mismo lo califica.
“Como el resto de la compañía a nivel mundial, se eliminaron procesos redundantes e ineficientes que no contribuían al valor de GM. Nos enfocamos más en nuestra misión y en alinear a la gente con el negocio”, apunta.
Actualmente, el equipo de Khan en México está conformado por 28 miembros, y trabaja muy de cerca con terceros como es el caso de HP/EDS y Capgemini bajo el modelo de outsourcing. De hecho, esta colaboración tiene un alcance global.
“GM es una compañía que trabaja con un esquema de outsourcing. Tenemos un liderazgo en TI bien definido, con personal que conoce los procesos de negocio y los sistemas, pero también hay atrás terceros soportándonos en todo el mundo”, añade.
Hoy, las prioridades están en cuatro áreas clave: satisfacción de los clientes, la TI buscará ayudar a GM a lanzar con éxito el nuevo portafolio de productos al mercado mexicano; optimizar su cadena de distribución y conservar su capital humano. Al mismo tiempo, se enfocará en mantener una operación estable y refinar su estructura de costos.
“Aprender de lo que experimentamos es parte del DNA de General Motors. La próxima vez que enfrentemos una situación complicada estaremos preparados, seremos ágiles para responder, adoptaremos el cambio de forma más rápida y tendremos a la gente adecuada”, concluye.