Facebook ha reconocido que algunos de los desarrolladores de aplicaciones con los que trabaja han vulnerado su política al vender datos de sus usuarios a otras empresas. La popular red social ha suspendido durante seis meses a casi una docena de desarrolladores que, según apuntan, no son con los principales con los que trabajan.
Facebook ha reconocido públicamente que han suspendido sus relaciones con casi una docena de desarrolladores externos con los que trabajaban tras comprobar que habían vulnerado su política de privacidad al enviar a empresas y agencias de publicidad datos de sus usuarios. En concreto, los datos que estos desarrolladores habían conseguido vender son los números que identifican a cada usuario de la red (UID), a partir del cual, se puede acceder a los datos privados de cada usuarios.
Aunque desde Facebook aseguran que las UID vendidas a terceros no han dado acceso a los datos privados de cada usuario, han decidido tomar medidas contra la casi docena de desarrolladores que han sido identificados como los que han vendido estos números de identificación a otras compañías. Una medida consistente en una moratoria de seis meses para todos aquellos desarrolladores, de los que no ha brindado su nombre, que hayan recibido dinero a cambio de facilitar estos números de identificación a terceros.