Cifras preocupantes se desprenden de un whitepaper publicado por Compuware, en el que se sitúan las pérdidas medias para una empresa entre los 60 mil y los 100 mil USD por cada hora de inactividad.
Por sectores, los mayores costos los sufren las empresas de Telecomunicaciones alcanzando los 10 millones de USD por hora perdida, seguido de las firmas de brokers financieros donde la cifra se calcula en 5 millones y las empresas de tarjetas de crédito que superan 2 millones por hora de inactividad. Por detrás se encuentran las empresas de pago por visión, compañías aéreas, ventas de entradas y retail con pérdidas de entre 150,000 y los 60,000 USD por hora inactiva. Como ejemplo sirve la compañía aérea Virgin quien en 11 días de interrupción en sus reservas por un problema en los sistemas operativos registró unas pérdidas, antes de impuestos, de entre 14 y 20 millones de USD.
Pero las perdidas no son solo de beneficios. Una empresa de entre 100 y 1.000 empleados sufre un promedio de 140 horas anuales de inactividad debido a problemas en las aplicaciones, lo que se traduce en reducción de productividad, pérdida de confianza de los clientes, e incluso problemas de seguridad y de responsabilidad legar por la pérdida de datos. Esta cifra aumenta si hablamos de compañías de más de 2,500 empleados donde el tiempo de inactividad se sitúa entre 8 y 14 horas al mes, superando el 40% de pérdidas en oportunidades de generar ingresos, según Gartner. Como muestra, afirma el informe, el 79% de los compradores online que encuentran problemas en una web, no vuelven a visitar el sitio.
El estudio concluye que el 74% de los problemas son detectados por los usuarios finales sin que las herramientas habituales de monitorización las hayan detectado, según Forrester Research. Por lo que resulta de vital importancia para los negocios contar con una herramienta que sea capaz de monitorizar la aplicación de principio a fin y detectar cualquier posible fallo antes de que sea percibido por el usuario.