La presente década experimenta el surgimiento de la Tercera Plataforma Tecnológica impulsada por tendencias que dan vida a un nuevo escenario de colaboración empresarial y donde se construyen soluciones que exigen comunicaciones eficientes. En esta era, las soluciones de tecnologías de información y comunicaciones (TIC) dependerán de la socialización de los negocios, probablemente serán entregadas como servicios en la nube y a través de redes móviles que, a su vez, generarán enormes cantidades de datos.
Esta nueva plataforma genera una nueva dinámica de hacer negocios que requiere una mayor colaboración entre el ecosistema de empresas y los individuos que las integran. Esta actividad origina la aparición de factores que aceleran la incorporación de soluciones de comunicaciones eficientes y que demandan su mejor administración. De acuerdo con IDC, la industria TIC estará soportando millones de soluciones de nueva generación, necesarias para competir en las economías y escalas de los mercados emergentes. La tercera plataforma y el creciente ecosistema e innovaciones alrededor de éstas, estarán en el centro de más de $5 trillones de dólares de gasto anual en TICs para 2020.
La movilidad, como parte de los pilares que marcan esta nueva era, ha revolucionado la forma de comunicación no solo entre individuos, sino entre empresas. Actualmente en México, existen más de 94 millones de usuarios de servicios de telefonía móvil, donde 1 de cada 5 accesos móviles ya son inteligentes. Por hablar de otros dispositivos móviles de acceso, las tabletas superarán el millón de accesos para 2012, creciendo a un ritmo superior, en tan solo un par de años, al experimentar por los siete millones de PCs que actualmente hay en el mercado mexicano.
En este sentido, la movilidad permea y a su vez representa un reto dentro del ambiente empresarial ante la correcta administración de los dispositivos pero ante todo, hacia el correcto despliegue de estrategias que generen resultados en el negocio. IDC ha identificado que una de cada tres empresas en México moviliza hasta 50% de sus empleados, lo que representa una tendencia de adopción significativa de dispositivos de acceso, así como de demanda de funcionalidades dadas por las características de dispositivos de acceso actuales.
Por otro lado, la presión que ejerce la llamada consumerización de TI, tendencia por la cual la tecnología empieza primero en el mercado de consumo y luego se expande dentro de las organizaciones, está creando presiones sobre la correcta administración de dispositivos que ingresan a las empresas y son utilizados para fines personales y laborales. Este creciente número de dispositivos, representa retos de escalabilidad y administración para las redes empresariales. La adopción de BYOD (bring-your-own-device) es un reflejo de la importancia que están ganando los dispositivos de acceso móvil y el reconocimiento que se tiene del valor que pueden generar en el negocio. Mientras en 2010 39% de las empresas en México permitía el acceso a información empresarial a través de los smartphones de los empleados, para 2011 la penetración se ubicó en 42%.
México es el segundo país en Latinoamérica, donde 50% del ambiente laboral de los trabajadores móviles se desarrolla alrededor de la generación de ingresos por el constante contacto que tienen con clientes. Las empresas han comprendido las ventajas de las inversiones en movilidad, por lo que en México una de cada dos empresas cuenta con planes para la incorporación de aplicaciones móviles dentro de sus organizaciones. El reto está en implementar aplicaciones acorde a las necesidades empresariales, moviéndose hacia nichos verticales y especializados, que generen negocio. Aunque el correo electrónico sigue siendo la aplicación móvil de uso más frecuente, otras aplicaciones empresariales tales como los de ventas/servicio de campo, inteligencia de negocios, comunicaciones unificadas, aplicaciones sociales, y todo tipo de aplicaciones verticales específicas, están creciendo en popularidad también.
En opinión de IDC, el potencial de aplicativos acorde a las necesidades de las empresas puede impactar en diversos rubros y brindar resultados de negocio. Para este 2012 se esperan inversiones en soluciones de movilidad en más del 50% de las empresas de México, donde podrían incrementar su inversión en hasta 30% de su gasto.
Ante el reto que representa la tercera ola tecnológica, las empresas están a tiempo de buscar y obtener mejores niveles de respuesta, mayor acceso y desde luego, menores costos asociados por las constantes interacciones que fomenta el escenario. Las empresas pueden no solo hacer converger los silos de infraestructura, sino también trasladar la complejidad de sus elementos en soluciones que contribuyan a mejorar la agilidad de respuesta, flexibilidad y colaboración en el ambiente empresarial.
