La Unión Internacional de Telecomunicaciones (ITU) ha creado un nuevo grupo temático sobre servicios financieros digitales encargado de promover los pagos móviles mediante el diseño de estándares internacionales.
Más de 2 500 millones de adultos no disponen de una cuenta bancaria oficial, la mayoría en países en desarrollo. Las plataformas de ‘dinero móvil’ normalizadas a escala internacional aumentarán la integración financiera en beneficio del desarrollo socioeconómico mundial. Los servicios financieros digitales pueden mejorar la prestación de servicios financieros básicos. Las normas reducirán drásticamente los costos de esos servicios para proveedores y clientes, y abrirán camino a las comunidades aisladas e insuficientemente atendidas.
El grupo temático de la ITU, abierto a la participación de todos los interesados, elaborará una hoja de ruta de normalización internacional de servicios financieros digitales compatibles, así como un conjunto de herramientas normativas que ayudarán a los poderes públicos y autoridades normativas nacionales a fomentar la adopción de sus servicios.
El grupo identificará las tendencias tecnológicas de los servicios financieros digitales que se espera ver aparecer durante los próximos años, y la manera en que las funciones de los diversos actores de este ecosistema evolucionarán en consecuencia. En sus trabajos prestará particular atención a las ventajas correspondientes para las mujeres.
Este trabajo, que constituirá un estudio multidisciplinario, abarcará exigencias técnicas, tales como los marcos arquitectónicos necesarios para los servicios financieros digitales, la seguridad de las transacciones móviles, cuestiones de política y reglamentación y protección del consumidor y lucha contra el fraude, así como modelos actividad comercial que puedan propiciar un crecimiento sostenible del incipiente sector del dinero móvil.
“El impacto extraordinario de las soluciones de dinero móvil en los países en desarrollo ha puesto de manifiesto que las TIC están al centro de la innovación en los servicios financieros”, señala Hamadoun I. Touré, secretario general de ITU. “Lo que nos falta es una norma internacional que facilite la compatibilidad entre los servicios ofrecidos por distintos operadores”.
“Los pobres tienen vidas financieras increíblemente complejas. Carecen de los servicios bancarios más básicos, sólo disponen de dinero en efectivo y están atrapados en un sistema arriesgado, caro e ineficaz que les impide protegerse contra los riesgos e invertir en su futuro”, comenta Rodger Voorhies, director de los servicios financieros del equipo Poor de la Bill & Melinda Gates Foundation, entidad promotora de la iniciativa. “Disponer de un asociado sólido como ITU, que trabajaba para hacer progresar la integración financiera en los países en desarrollo y mercados emergentes, encauzando las posibilidades de las tecnologías digitales, será fundamental para ayudar a crear oportunidades y mejorar las condiciones de vida de las personas”.