A medida que las revoluciones de la nube y la computación móvil continúan ganando terreno, las personas esperan una mayor inteligencia por parte de las aplicaciones que utilizan. Ahora que la gente se está acostumbrando más a aprovechar cosas como el asistente virtual de Microsoft, Cortana, o Siri de Apple, los desarrolladores de aplicaciones tienen una gran oportunidad de utilizar sistemas similares con el fin de impulsar la participación.
El Proyecto Oxford de Microsoft es un conjunto de servicios en la nube diseñados para ayudar a proporcionar esa inteligencia a las aplicaciones, sin necesidad de que los desarrolladores construyan los complejos algoritmos de visión artificial y aprendizaje de máquina que son necesarios para impulsar esas experiencias. El lunes, la compañía anunció que el Language Understanding Intelligent Service (LUIS) del Proyecto Oxford estaba disponible como beta pública, poniéndolo a disposición de más desarrolladores de todo el mundo.
LUIS permite a los desarrolladores construir modelos para el procesamiento de los datos de entrada de lenguaje natural y convertirlos en acciones dentro de su aplicación. Con la actualización del lunes, Microsoft también ha puesto a disposición de los desarrolladores más modelos creados previamente (incluidos aquellos que son la base de varios de sus productos). Además, el servicio es ahora compatible con los datos de entrada en chino, junto con los datos de entrada en chino mixto e inglés.
Los desarrolladores pueden también importar y exportar aplicaciones LUIS como objetos JSON, lo que significa que se puede construir un modelo completo de cómo se supone que algo funcione, y luego compartirlo a través de una serie de aplicaciones, además de comprobar ese modelo en un software de control de versiones de modo que los compañeros del equipo pueden estar al tanto de lo que está pasando con las capacidades de lenguaje natural de la aplicación.
Es una herramienta que Microsoft está utilizando internamente para alimentar el nuevo servicio GigJam de la compañía, que actualmente se encuentra en fase de beta privada en varias empresas. Con LUIS, los usuarios de GigJam pueden decir algo así como “compartir esto con Katherine”, y hacer que el sistema envíe cierta información a la compañera de trabajo. Ese mismo poder se encuentra ahora disponible para cualquier persona con esta beta pública.
Microsoft también abrió nuevos kits de desarrollo de software en GitHub para el Proyecto Oxford. Éstos incluyen herramientas para el uso de APIs de rostro, visión de computadora y voz del Proyecto Oxford, y están disponibles bajo una licencia de código abierto del MIT. Eso significa que los desarrolladores podrán supervisar el código fuente, ver cómo ha evolucionado con el tiempo e incluso contribuir al código si tienen algo que agregar.
Todo esto es una buena noticia para las ambiciones de la nube de la compañía, ya que estos servicios tendrán un costo para aquellos desarrolladores que los utilicen en sus aplicaciones. A medida que esas aplicaciones se vuelvan más populares, Microsoft debería empezar a ganar más dinero.