A la par del constante incremento en la adopción del uso de internet y tecnologías móviles para distintas tareas en el campo laboral y personal, el cómputo en la nube representa un cambio de paradigma en el acceso y utilización de recursos informáticos. El avance tecnológico ya no se limita al hardware o las capacidades físicas de los diferentes equipos, sino que se enfoca en transformar la relación existente entre los usuarios u organizaciones y sus dispositivos.
Estas nuevas adaptaciones en el campo tecnológico, se pueden traducir en grandes beneficios para los usuarios debido a la flexibilidad, disponibilidad y accesibilidad de estos sistemas. Más aún, el uso de esquemas de cómputo en la nube permite a empresas y gobiernos optimizar el uso de recursos tecnológicos, optimizar el consumo energético, aumentar la productividad, almacenar grandes cantidades de datos, e incluso generar economías de escala.