Los líderes TI
Cuando Abraham Galán Ramírez se integró a esta compañía paraestatal en marzo de 2010 para conformar la Dirección Corporativa de Tecnologías de Información y Procesos de Negocio, tenía claros sus objetivos: consolidar las múltiples áreas de TI existentes, reducir costos y generar valor.
“Los cambios en empresas de la dimensión de Pemex no son sencillos”, asegura el funcionario. “Una cosa es lo que dice la alta dirección o la de TI, y otra convencer a la gente de hacerlo”.
Así, con el apoyo del propio director general Juan José Suárez Coppel, Galán Ramírez arrancó con el primer gran proyecto de su administración – consolidar los departamentos de TI de las cinco subsidiarias: PEMEX Exploración y Producción, PEMEX Refinación, PEMEX Gas y Petroquímica Básica, y PEMEX Petroquímica.
“A excepción de Instituto Mexicano del Petróleo (IMP), estas subsidiarias se consolidaron bajo la Dirección Corporativa de Tecnologías de Información y Procesos de Negocio. La intención era tener una estrategia tecnológica común para la empresa”, explica.
Una de las acciones que se realizaron fue la integración de un solo sistema de planeación de recursos empresariales (ERP). Un cambio radical a la práctica previa en la que cada una de las subsidiarias contaba con un ERP de diferentes proveedores. Asimismo, se unificó el dominio de correo electrónico a Pemex.com, y se dejó de utilizar un dominio propietario de cada subsidiaria.
En el plan de trabajo de Galán y su equipo hicieron el compromiso de reducir los costos en 15 por ciento, a lo que él sumó otro 5 por ciento más para llegar a la meta de lograr ahorros globales de hasta 20 por ciento. Hasta ahora, la dirección a su cargo reporta ahorros por 1,500 millones de pesos.
A decir de Galán Ramírez, gran parte de los beneficios se originaron de las iniciativas de virtualización. Se contaba con aplicaciones, sistemas operativos, software de una gran cantidad de proveedores de TI, y la infraestructura existente estaba subutilizada. En el proceso de la consolidación de las unidades de TI, por ejemplo, se dieron cuenta de que existía equipo que sólo se utilizaba a 20 por ciento de su capacidad, así que se buscó aprovecharlo al máximo.
Algo similar ha ocurrido con la administración de facturas electrónicas. Pemex había estado trabajando con un proveedor de este servicio que no tenía la capacidad necesaria para manejar hasta 180 mil facturas electrónicas cada día, así que fue reemplazado con otro que había probado tener la capacidad responder a las demandas de la paraestatal, logrando así más efectividad y ahorros. “Esas son experiencias que uno tiene en las industrias y que pueden ser de beneficio económico para Pemex”, asegura Galán.
Como el orquestador de la reorganización lograda a través de la Dirección General de Tecnología de Información y Procesos de Negocio, Abraham Galán Ramírez es un convencido de poner manos a la obra. “En una organización de la magnitud de Pemex, si se piensa mucho no se ejecuta nada. Prefiero ejecutar y corregir en el camino, que hacer algo muy pensado y que tal vez no dé tiempo de realizarlo”, afirma.
En 2011, explica, “consolidaremos el portafolio de aplicaciones geocientíficas y nos involucraremos más en rediseñar los procesos de downstream y upstream. Asimismo, se trabajará en temas de logística y distribución, y seguridad”.
Uno de sus proyectos más ambiciosos a futuro es disminuir el uso de la red de telecomunicaciones, la cual actualmente es arrendada, y aprovechar los ductos que conectan a sus instalaciones en todo el país para colocar fibra óptica. Esto, además de brindarles una infraestructura propia, también podría contribuir a una mejor protección.