Gianfranco Lanci tendrá que defenderse de una demanda que Acer ha presentado en su contra. La compañía taiwanesa acudió a los tribunales italianos para denunciar al que había sido su CEO durante los últimos años. Las acusaciones de Acer tienen que ver con un contrato que Lanci firmó al irse de la compañía en el que se habría comprometido a no trabajar para empresas de la competencia durante un periodo de 12 meses.
El contrato en cuestión se firmó tras la salida de Gianfranco Lanci de Acer y según la compañía, ambas partes acordaron y firmaron el acuerdo en febrero de 2011. Dicho acuerdo pretendía garantizar que Lanci no firmaría por empresas de la competencia en un año, con el objetivo de que sus actividades no afectasen a la firma taiwanesa.
Según Acer, dado que el acuerdo se firmó en febrero de 2011 y tiene una duración de 12 meses, Lanci no debería haber colaborado con ninguna empresa competencia de Acer hasta este mes de febrero. Sin embargo, Gianfranco Lanci entró a colaborar con la compañía Lenovo en septiembre de 2011 y actualmente ostenta el puesto de responsable de la firma para Europa, Oriente Medio y África.
Acer considera que la participación de Gianfranco Lanci en Lenovo incumple el contrato que había firmado tras su marcha de la compañía y por eso ha decidido presentar acciones legales en su contra en Italia. El directivo ahora tendrá que defenderse de las acciones de Acer y deberá demostrar su inocencia en los tribunales.
“Pensamos que Lanci claramente ha violado los términos del contrato de no competencia que firmó de buen grado. Creemos que es un caso sólido”, han comentado desde Acer en declaraciones recogidas por el diario Financial Times.