AMD vuelve por la puerta grande al mercado de alta tecnología con el chip Summit Ridge. Después de la que ha sido una mala época para la empresa de chips, el procesador Zen (Summit Ridge en clave) llegará a las computadoras más refinadas al final de este año.
Para asegurarse el retorno a la industria, AMD está negociando con los fabricantes de PC para que integren el chip Zen según ha confirmado por teléfono a IDG Lisa Su, CEO de la empresa. Está previsto que para principios del 2017, el chip Summit Ridge ya esté en los servidores, los portátiles ya serán un mercado aparte.
En AMD tienen muchas esperanzas puestas en el procesador; con él esperan llegar a los gamers gracias a la alta calidad de la realidad virtual que alcanza el chip Zen con sus GPU integrada en la arquitectura Polaris. Además, este chip puede suponer un aumento en su cuota en el mercado de procesadores de computadoras; actualmente está controlado por los chips Skylake y Kaby Lake de Intel, después de que esta empresa le haya ganado mucho terreno en los últimos años a AMD.
El ‘super’ chip
Hasta ahora la empresa ya comercializaba con chips FX, de los que casi ocho estaban enfocados en los gamers; es probable que Summit Ridge se venda bajo esta marca.
Según confirma el CEO de AMD, los procesadores tendrán una alta capacidad de computación y soportarán la última memoria DDR4. Además, las CPU que tengan un chip Zen conseguirán un rendimiento un 40% superior a los núcleos de CPU Excavator.
Las evidentes mejoras de los chips son el resultado de inversión que ha hecho la empresa en desarrollar nuevas tecnologías: el avanzado sistema de ancho de banda mejora el funcionamiento interno, de forma que la caché, la memoria y las CPU se puedan comunicar mejor. Para ello el Summit Ridge se fabricará con un avanzado procesador de 14-nanómeteros que también mejorará la eficiencia y la potencia de los ordenadores.
Parece que este producto podría poner fin a la decadencia de AMD de los últimos tiempos: debido al descenso de remesas de computadoras, los beneficios de la empresa descendieron a 470 millones de dólares en el último trimestre fiscal del 2015, una cifra muy lejana a los 662 millones de dólares del año anterior. En cuanto a las pérdidas, AMD informó de una cantidad que ascendía a los 79 millones el mismo trimestre, un dato que AMD quiere evitar repetir a toda costa.
-IDG.es