La muerte de Steve Jobs provocó una auténtica avalancha de reconocimientos para el ex CEO de Apple. Calificativos de visionario o genio formaron parte de un gran número de alusiones en memoria de Jobs. El periodista Bill Snyder, comparó los reconocimientos a Steve Jobs con la ausencia de ellos a otra figura importante del mundo de la tecnología, Bill Gates.
El trabajo de Steve Jobs es un hecho, y todas las muestras de afecto y los reconocimientos son justos. Sin embargo, Snyder critica que se tienda a elevar a unos personajes y a excluir a otros, aunque sus méritos también sean importantes. Este tipo de actuación la está sufriendo el cofundador de Microsoft, Bill Gates, cuyas acciones se ven eclipsadas y comparadas con las de Steve Jobs.
Para Bill Snyder, el trabajo de Gates debe ser valorado, y más allá de sus contribuciones al mundo de la tecnología, se deben valorar también sus importantes aportaciones en materia de filantropía. Snyder explica que si bien es cierto que el trabajo de Jobs fue extraordinario, también lo es que el de Gates ha sido sobresaliente, y que sus acciones fuera del mundo empresarial han superado a las de su colega.
Bill Gates y su esposa crearon una fundación filantrópica a la que donan parte de sus ingresos para fines humanitarios. Además, Gates participa en una campaña que tiene como objetivo terminar con la Malaria en los países más desfavorecidos. Todas estas acciones dotan a Gates de un valor especial, que parece que no se reconoce.
Otro aspecto que Bill Snyder critica tras la muerte de Steve Jobs es el culto a los productos que los usuarios han hecho. Para el periodista, se han idolatrado los productos y se ha identificado a Steve Jobs como el único responsable de la evolución tecnológica. Snyder considera que lo justo es reconocer que el trabajo de Gates también ha sido fundamental para la popularización de la tecnología y es un paso imprescindible para las ideas desarrolladas de Jobs.
Snyder finaliza comentando, que a su juicio, Gates también es un líder que merece reconocimiento, posiblemente no como líder de negocios como Jobs, pero si como un “líder de personas”.