Check Point Software Technologies descubrió a Naikon, un grupo chino APT que llevaba cinco años realizando operaciones de ciberespionaje contra varios gobiernos de Asia y Pacífico.
Naikon reconoció en 2015 la autoría de varios ataques contra organismos gubernamentales y otras organizaciones en países situados alrededor del Mar de China, que tenían como objetivo acceder a información política confidencial. Sin embargo, durante ese mismo año el grupo parecía haber cesado su actividad, pero fue solo en apariencia, puesto que los investigadores de la compañía han descubierto que el grupo no sólo se ha mantenido en activo durante los últimos cinco años, sino que también ha incrementado sus acciones de ciberespionaje durante todo el 2019 y el primer trimestre de 2020.
Este grupo de cibercriminales dirige sus ataques principalmente a entidades gubernamentales como los ministerios de asuntos exteriores o ciencia y tecnología de países de la región de Asia y Pacífico, entre los que destacan Australia, Indonesia, Filipinas, Vietnam, Tailandia, Myanmar y Brunei. Su principal objetivo es reunir una gran cantidad de información sensible con fines geopolíticos.
¿Cómo desarrolla Naikon sus ataques?
El modus operandi de este grupo consistía en infiltrarse en un organismo gubernamental con el objetivo de utilizar sus contactos y documentos para lanzar ataques contra otras entidades, aprovechando la confianza y las relaciones diplomáticas para aumentar el porcentaje de éxito de que sus ataques. Los expertos de Check Point comenzaron su investigación analizando un correo electrónico enviado al gobierno australiano que incluía un documento adjunto infectado. Este archivo contenía un exploit que, al abrirse, se infiltraba en la PC del usuario e intentaba descargar un nuevo y sofisticado malware de puerta trasera (backdoor) llamado “Aria-body” desde los servidores web externos utilizados por el grupo Naikon. De esta forma, el grupo de cibercriminales obtenía acceso remoto al equipo o a la red infectada sin que ninguna herramienta de seguridad lo detectase.
La cadena de infección se desarrolla en tres etapas:
- Suplantar la identidad de un organismo gubernamental para engañar a la víctima: Naikon comienza su ataque elaborando un correo electrónico con un documento que contiene información de interés para los objetivos. Estos datos pueden sacarse de fuentes abiertas, aunque procuran utilizar información robada de otros sistemas.
- Infectar los documentos con malware para infiltrarse en los sistemas de destino:el grupo de cibercriminales infecta los documentos con “Aria-body”, un malware de tipo backdoor que les ofrece acceso a las redes de los objetivos.
- Usar los propios servidores de los gobiernos para continuar y controlar los ataques: Naikon se aprovecha de las infraestructuras y los servidores de sus víctimas para lanzar nuevos ataques, lo que contribuye a evitar su detección. Los expertos de Check Point descubrieron en uno de los casos que analizaron que el servidor que se había utilizado para el ataque pertenecía al departamento de ciencia y tecnología del gobierno de Filipinas.
Asimismo, los expertos de la compañía recomiendan contar con las mejores herramientas de seguridad para poder hacer frente a las nuevas generaciones de ciberamenazas, que son cada vez más sofisticadas.