Internet, como todos conocemos, refleja el diseño de viejos mainframes con terminales tontas: la ruta de datos está orientada casi por completo a la información que viene de la red desde una ubicación central. No importa si se trata de su iPhone o una terminal de texto verde, la conexión rápida siempre ha estado inactiva, con relativamente pocos datos enviados.
La llegada del IoT amenaza con poner eso de cabeza. IoT significará una avalancha masiva de dispositivos de punto final que no son consumidores de datos, sino productores de los mismos; data que debe ser procesada y adoptada. Eso quiere decir, el envío de una gran cantidad de datos por un estrecho conducto hacia los centros de datos.
Por ejemplo, un automóvil autónomo puede generar 4TB de data por día, principalmente por sus sensores. Sin embargo, el 96% de esa data es lo que se llama cierto pero irrelevante, según Martin Olsen, vicepresidente de Soluciones Globales Integradas y Edge en Vertiv, un proveedor de soluciones de cloud computing y centros de datos. “La parte relevante es ese 4% restante. Esa es la información que queremos llevar a otro lugar”, comentó.
Entonces, ¿esto significa una inversión masiva en la reorganización de la red para acoplar conductos más anchos al centro de datos? ¿O la llegada de Edge Computing podrá aligerar la carga de los almacenes de datos centrales haciendo gran parte del trabajo de procesamiento en el extremo de la red?
¿Qué es Edge Computing?
Edge Computing es un procesamiento de datos descentralizado específicamente diseñado para manejar los datos generados por Internet de las Cosas (IoT, por sus siglas en inglés). En muchos casos, el equipo de cómputo se almacena en un contenedor o módulo físico del tamaño de un contenedor de envío de carga, y se ubica en la base de una torre de telefonía móvil, pues de ahí provienen los datos.
Edge computing ha servido principalmente para ingerir, procesar, almacenar y enviar datos a los sistemas en la nube. Es el extremo donde el trigo se separa de la paja, y solo se envía data relevante a la red.
Si el 4% que Olsen mencionó puede ser procesado en el extremo de la red -en lugar de un almacén de datos central-, reduce las necesidades de ancho de banda y permite una respuesta más rápida, comparado con enviarlo al servidor central para su procesamiento. Todos los principales proveedores de la nube -como AWS, Azure o Google Compute Engine- ofrecen servicios de IoT y procesan lo que se les envía.
En muchos casos, edge puede realizar ese procesamiento y descartar los datos innecesarios. Dado que los proveedores de la nube cobran por la cantidad de datos que procesan, el interés financiero del cliente es reducir la cantidad enviada para el procesamiento.
“Necesitamos mucha más computación en el extremo de la red. Esto impulsa un cambio profundo pero interesante; si bien, veremos muchos más datos generados en el extremo, una cantidad muy limitada necesitará viajar realmente lejos”, afirmó Olsen.
“Los centros de datos Edge tienden a acumular data y realizar funciones de actuación para dar una respuesta de baja latencia”, comentó Jim Poole, vicepresidente de desarrollo comercial de Equinix. “Lo que la mayoría de las compañías todavía hace es agregar metadatos de todas estas ubicaciones en los extremos, a una ubicación central para llevar a cabo análisis y aprendizaje automático”.
Prashanth Shenoy, vicepresidente de Marketing para Redes Corporativas e IoT de Cisco, está de acuerdo en que una mayor cantidad de computación debería ser llevada al extremo.
“El cómputo se ha vuelto más barato y rápido que la red, lo que sugiere que ahora el cómputo debería estar en el extremo”, señaló. “Además, en los casos en que el ancho de banda es escaso o los usuarios se encuentran en ubicaciones remotas, como en alta mar o en una mina, y no tienen conectividad, es necesario el cómputo y análisis en el extremo”.
Inteligencia artificial en redes edge
Otro elemento importante para reducir la carga de datos será el uso de inteligencia artificial (IA) en las redes edge, aseguró Jeff Loucks, director ejecutivo en el centro de tecnología, medios y telecomunicaciones en Deloitte.
“El uso de IA en redes edge reducirá los datos necesarios en los centros de datos. Cuando se piensa en todos los datos recopilados por un vehículo autónomo, incluso si se agranda el tamaño del conducto, se procesan muchos datos. Por este motivo, agregar IA será clave”, anotó. “Ya estamos viendo algoritmos de aprendizaje automático en dispositivos de bajo costo, como una cámara de seguridad que puede diferenciar un gato de un intruso. No necesitamos dispositivos de alto precio, solo los algoritmos de menor costo y dispositivos más ubicuos”.
La conexión inalámbrica 5G puede ayudar a las redes edge
Otro elemento para hacer que la avalancha de IoT sea manejable será la llegada de la tecnología inalámbrica 5G. El Wi-Fi es útil en algunos escenarios, como IoT industrial, donde el equipo se encuentra en un espacio cerrado y relativamente limitado, como en el piso de una fábrica, y los puntos de acceso Wi-Fi pueden manejar el tráfico. Pero para muchas situaciones, el Wi-Fi simplemente no proporciona suficiente alcance o rendimiento, aunque podría lograrlo en el futuro con nuevos protocolos de alta velocidad como 802.11ax.
Para IoT al aire libre, como vehículos autónomos o sitios remotos como lugares de trabajo industrial o plataformas petrolíferas en alta mar, la red móvil es la elegida por su alcance y ancho de banda. Es por eso que los contenedores de Edge Computing se colocan en el sitio de una torre celular.
El 5G, que actualmente está siendo probado en los EE.UU. y se espera que sea lanzado a principios del próximo año, se diseñó teniendo en cuenta el uso empresarial, a diferencia del enfoque más centrado en los consumidores de 3G y 4G. 5G es 20 veces más rápido que 4G, con una velocidad máxima de descarga de 20Gbits/seg vs. 1GBit/seg para 4G.
“5G será muy útil para aumentar la cantidad de datos que se pueden enviar”, comentó Loucks. “La tubería puede ser más grande, por lo que aumentará la cantidad de datos que fluyan en ambos sentidos”. Además, 5G reduce la latencia, lo que ayudará a las aplicaciones industriales que requieren mucha precisión debido a que tienen una latencia tan baja. 5G ayudará a corregir los problemas de latencia”.
“5G es absolutamente clave para hacer que esta arquitectura funcione”, aseguró Olsen. “Actualmente, una parte muy pequeña del tráfico de Internet pasa por redes inalámbricas debido al ancho de banda y latencia. Todos somos mucho más móviles y nos gustaría tener más capacidad. 4G está mal equipado para manejar todo este tráfico y resolver las velocidades”.
No obstante, a Poole de Equinix no le convence por completo el 5G como solución. “La industria no ha demostrado la necesidad de aplicaciones de latencia ultra baja. Muy pocos casos de uso necesitan latencia por debajo de cinco milisegundos. Nunca digas nunca, pero no hay nada viable en el mercado que necesite ese tipo de latencia”, sostuvo.
Pagar por redes edge
Existen varios desafíos cuando se trata de mover el cómputo al extremo, comenzando por el costo de la infraestructura informática. Los contenedores de red edge que contienen todo el equipo de cómputo no son baratos, por lo que la pregunta es, ¿quién los pagará?
“En este momento, el modelo de negocios no está claro”, comentó Olsen. “Tienen el material, pero no está claro cómo ganan dinero. Tal vez Uber o las compañías de seguros pueden financiarlo para ver cómo las personas están conduciendo. Pero el mayor desafío es cómo hacer que sea rentable”.
Olsen también consideró que el centro de datos tendrá que crecer solo para almacenar toda la data que ingresa, incluso si se trata de una pequeña porción de lo que se genera. “Mucha gente dice que edge es el final de los centros de datos en la nube, pero es muy pronto para decirlo. No habría ninguna razón para creer que no son necesarios los centros de datos empresariales”, comentó.
“Habrá necesidad neta de más. Incluso hablando de porcentaje de un solo dígito de lo que se genera en la red, cuando se tratan cosas como seguridad y privacidad, todos estos [datos adicionales] tienen que almacenarse en algún lugar. Para el almacenamiento a largo plazo se egresa y se buscan estos datos para analizar”, agregó.
Poole dijo que algunos de los primeros en Edge Computing están reutilizando sus centros de datos para el uso computacional a largo plazo. “El modelo de implementación de TI se ha puesto patas arriba. Ahora edge está en todas partes, y el centro de datos corporativo está siendo replanteado para la analítica. Las firmas de servicios financieros han trasladado su trabajo comercial diario a Equinix, y utilizan su propio centro de datos para la analítica que todavía tienen que llevar a cabo”, añadió.
– Andy Patrizio, Network World (EE.UU.)