Quien paga, juega. Esta es la idea que parece subyacer en las nuevas políticas de privacidad de Linkedin, actualizadas el pasado viernes y que entrarán en vigor a partir del próximo 7 de junio. Y, es muy importante que los empleados que utilizan los servicios premium de la red social tengan en cuenta esta frase antes de ponerse a bucear en la página o a presentar su candidatura para puestos en empresas competidoras. Porque, tal y cómo asegura la propia compañía, “usted es el dueño de su cuenta personal, pero quien contrata las características premium tiene el derecho a vetar su acceso a estos servicios, así como a obtener información sobre el uso que le está dando a dichos privilegios pagados”.
Sin embargo, las nuevas condiciones parecen excluir la opción de búsqueda de trabajo del dominio de los jefes o, por lo menos, dejan un espacio para llegar a un acuerdo entre ambas partes. “Entendemos que ciertas informaciones como la búsqueda de empleo o los mensajes personales son críticos y no será obligatorio compartirlos con el pagador a menos que elijan esa opción dentro de la plataforma”. Esto significa que los usuarios deben ser muy cuidadosos a la hora de configurar sus acuerdos y asegurarse de que no están compartiendo datos (en estos ámbitos) que no quieran, con sus responsables.
Otro aspecto a tener en cuenta –y que no aparece en la nueva normativa de Linkedin- tiene que ver con si ya está compartiendo información que podría violar los acuerdos de confidencialidad de su empresa. Como periodista especializado en nuevas tecnologías he encontrado muchos ‘regalitos’ dentro de los perfiles de profesionales del mundo TI.
Por ejemplo, cuando investigo a proveedores, encuentro frecuentemente reseñas de gente que narra con todo lujo de detalle los problemas que ha resuelto. Los perfiles dan cuenta de graves problemas que han sucedido, especificando el tipo de error de sistema, datando el suceso y pormenorizando todos los daños. Después, los profesionales TI detallan como lo han arreglado. Sin duda, es un caramelo para los abogados que tratan con temas de confidencialidad.
Si volvemos a los puntos del nuevo acuerdo entre Linkedin y los usuarios, encontramos algunos pasajes, como éste a continuación, que podrían recibir algo así como un premio denominado el ‘Juramento Más Hipócrita’. Literalmente asegura que “añadimos que nuestra restricción contra la creación de identidades falsas en nuestros servicios no ha sido renunciada solo porque Linkedin pueda permitir un perfil claramente ficticio en relación con una campaña promocional que ha aprobado”.
Otra política incomprensible: “Si no está de acuerdo con estos cambios, puede cerrar su cuenta”. Pero, si decide irse, ¿cree que sus datos serán borrados? Esta es la respuesta: “retenemos su información personal incluso después de haber cerrado la cuenta siempre que ésta sea estrictamente necesaria para cumplir con nuestras obligaciones legales, los requisitos reglamentarios, la resolución de conflictos, el mantenimiento de la seguridad y la prevención del fraude y el abuso”.
Luego está el recordatorio de todas las formas en que la red social le seguirá para siempre. “Si opta por importar su libreta de direcciones, recibiremos sus contactos, incluida la información de contacto de su proveedor de servicios o de la aplicación que se agregó automáticamente a su libreta de direcciones. Si sincroniza su correo electrónico o calendarios recopilaremos su información sobre sus reuniones y datos personales sobre usted cuando utiliza los servicios de nuestros clientes y socios, tales como posibles empleadores y sistemas de seguimiento que nos proporcionan datos de solicitud de empleo”, refiere el acuerdo. “Registramos los datos de uso cuando visita o usa nuestros servicios, incluyendo nuestros sitios. Utilizamos direcciones de inicio de sesión, cookies, información del dispositivo y direcciones de protocolo de Internet, así como su ubicación, servidor proxy, sistema operativo, navegador web y complementos”.
Pero, para ser justos, esta no es, ni siquiera de cerca, la peor política de privacidad que he visto. Pero dada la cantidad de datos que muchas personas del mundo TI introducen en Linkedin, vale la pena echar un vistazo a todos estos cambios.
-IDG.es