De acuerdo con estimaciones de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), los fraudes cibernéticos crecieron 35% en el primer trimestre de 2019, con respecto al mismo periodo del año anterior.
Más aún, al corte de junio de 2019 se habían reportado 2 millones 807 mil 819 de reclamos.
Los tipos más comunes de fraude durante las vacaciones son: el fraude sin tarjeta (CNP) y el fraude amistoso.
Los expertos anticipan que el fraude con tarjeta no presente (CNP) costará a los minoristas 130 mil millones de dólares desde ahora y hasta 2023, mientras que el fraude amistoso representa el 86% de todas las devoluciones de cargo fraudulentas; este tipo de fraude es un contra cargo de un cliente legítimo que realizó una compra y luego solicita un reembolso.
“Sin importar la fecha o temporada, las empresas deben estar preparadas para prevenir y reducir las consecuencias de los fraudes”, aseveró Luis Alberto Sánchez, General Manager de Emailage para México y Centro América, quien compartió cuatro tácticas para lograrlo:
Estrategia móvil. Se espera que las transacciones móviles rompan récords este año. “Sólo asegúrese que su estrategia de ciberseguridad móvil esté actualizada”, expresó Sánchez.
Limpieza de la base de datos. Validar y normalizar la base de datos de sus clientes será un regalo para el equipo de marketing de la empresa, y también ayudará a detener los fraudes durante las temporadas altas. Existen soluciones para descubrir el comportamiento de compras online y así prevenir incidentes.
Pruebe su motor de riesgo. Al respecto, Sánchez sugirió buscar cuáles son las brechas en su plataforma para evitar fraudes y disminuir los riesgos. “Realice pruebas para identificar cualquier posible agujero que los defraudadores puedan aprovechar”.
Finalmente, recomendó efectuar un análisis en tiempo real. Durante esta temporada el volumen y la velocidad de las transacciones aumentan en el comercio electrónico, por lo que es crucial que las empresas realicen un análisis en tiempo real, que permita al departamento encargado de prevenir los fraudes, identificar tendencias y riesgos para detenerlos antes de que una actividad engañosa genere una crisis. Comprender los tiempos de respuesta es otra forma de proteger sus resultados durante la temporada alta.
Enfoque hacia las transacciones online
Para el directivo de Emailage, el endurecimiento de la seguridad en las tarjetas, la implementación generalizada de los estándares de tecnología EMV (estándar de interoperabilidad de tarjetas con circuito integrado) y TPV (estándar para la autenticación de pagos mediante tarjetas de crédito y débito), así como con el incremento de regulaciones de seguridad, los defraudadores se han centrado en las transacciones en línea.
“Los negocios siempre deben actuar de manera proactiva y no reactiva a la hora de enfrentar fraudes en línea, ya que es una tendencia que está evolucionando y creciendo, tanto en México, como en el mundo, donde las nuevas generaciones son más propensas a comprar sin asistir a un comercio”, señaló Sánchez.
Agregó que los negocios también deben estar atentos a las necesidades y permitir las compras sanas en línea, evitar la fricción en las compras y “volver la experiencia de la compra en línea en un proceso seguro y amigable”.