Según la Real Academia Española (RAE) el término “domótica” proviene de la fusión de las palabras latinas domus y automática y la define como: “conjunto de sistemas que automatizan las diferentes instalaciones de una vivienda”.
Al pensar en este término, es fácil imaginar casas futuristas totalmente automatizadas por medio de Inteligencia Artificial, algo lejano y propio de películas de ficción. Sin embargo, aun cuando no sabíamos de qué se trataba, desde hace algunos años los avances tecnológicos más sencillos ya se encuentran al alcance de cualquier persona y es muy probable que en su casa se utilicen herramientas tecnológicas sencillas que están dentro de esta nueva tendencia.
Un ejemplo claro de esto fue la llegada de los electrodomésticos como las lavadoras de ropa, las aspiradoras, las licuadoras, los ventiladores, la bombilla, la plancha de mano y demás enseres que fijaron los precedentes de los sistemas domóticos.
Aarón Olvera, Key Account Manager de la empresa EZVIZ, comenta que en la actualidad la domótica incursiona en tres áreas:
- Seguridad: Accesos automatizados y sin llaves, cámaras de video vigilancia y alarmas.
- Cultura, ocio y entretenimiento: Bocinas inteligentes, pantallas de televisión conectadas a internet, asistentes virtuales.
- Confort y ahorro energético: Termostatos, sistemas de filtración de agua y aire, instalaciones de luz solar.
La domótica forma parte de lo que se conoce como el Internet de las Cosas (Internet of Things o IoT) y cada vez es más común referirse a casas inteligentes, términos que hasta hace pocos años se aplicaban a ambientes corporativos o casas que implican una fuerte inversión, debido a que los sistemas automatizados estaban aún lejos del alcance del usuario común, pero a medida que la tecnología se abarata cada vez es más fácil tener acceso a sistemas domóticos eficientes con productos tecnológicos sencillos y accesibles.
“En la actualidad una serie de productos nos ayuda a crear una casa inteligente con una inversión mínima, ya que además de ser accesorios que no requieren de una instalación compleja, la mayoría de ellos sólo necesitan conectarse a la corriente eléctrica, vincularse con la red wifi de la casa y con los dispositivos móviles de los usuarios y listo, se pueden controlar diferentes aspectos del hogar”, comenta Aarón Olvera.
Un ejemplo claro de esto son los productos enfocados a crear casas inteligentes de manera fácil, la automatización de luces se hace posible gracias a bombillas LED WiFi regulables, para mantener segura la entrada de la casa se cuenta con cerraduras electrónicas sin llave, con apertura a través de huella dactilar y teclado táctil.
Con enchufes inteligentes se podrá controlar el encendido y apagado a distancia de cualquier electrodoméstico y por supuesto cámaras de videovigilancia, capaces de reconocer siluetas humanas, detectar movimiento y transmitir en tiempo real a cualquier dispositivo móvil conectado a Internet.
En lo que refiere a seguridad, tanto de los bienes como de las personas, hoy existen cámaras de videovigilancia que pueden ser monitoreadas desde un dispositivo móvil. También es posible gestionar de manera remota y en tiempo real los accesos a una vivienda o asistir a una persona que se encuentre en algún tipo de emergencia.
Además, muchos hogares cuentan con servicios de streaming de video, música y videojuegos que son manipulables con la ayuda de un asistente virtual que, a su vez, es controlado por sencillas instrucciones dictadas por voz.
Otras aplicaciones de la domótica en el hogar pueden ser sistemas de riego para el jardín, gestión de sistemas de calefacción y aire acondicionado, instrumentos de cocina y limpieza como lavadoras y aspiradoras, todo esto programable con la ayuda de un asistente virtual o una aplicación móvil, con la finalidad de ahorrar tiempo, también tener un ahorro considerable en el gasto de energía, aseveró Olvera.