Ante esta situación, Widenius hizo un llamamiento a los usuarios para que expresen su oposición a la compra, dado que las autoridades europeas pueden todavía impedir la unión de las dos empresas u obligar a Oracle a hacer determinadas concesiones y aportar ciertas garantías respecto a MySQL, según explica el creador de la base de datos en una entrada de blog.
Widenius asegura que Oracle ha contactado a “cientos de sus grandes clientes” pidiéndoles que presionen a la
Unión Europea para que de su visto bueno a la compra. Oracle aseguró a los clientes que invertirá más dinero en el desarrollo de MySQL y que incluso si decidiera abandonar la base de datos, las ramificaciones de ella nacidas –una de las cuales es la base de datos recién creada por Widenius: MariaDB – cuidarían de su desarrollo”. Pero esto no es suficiente, según Widenius.“Simplemente invertir dinero en desarrollo no es una prueba de que de ello vaya a derivarse nada útil, ni de que MySQL continúe existiendo como la misma fuerza competitiva que es hoy día”, argumenta. “Y una ramificación no es suficiente para garantizar la existencia futura de MySQL, si Oracle, como eventual propietario de MySQL, decide eliminarla o cerrar partes de su código”.
Para evitar el peligro de la desaparición de la base de datos Widenius anima a los usuarios a que hagan oír su voz enviando cartas a la Unión Europea, bloggeando y hablando con los ejecutivos de sus compañías.