El día en que Apple pone a la venta oficialmente el nuevo modelo de iPad, el portal de reparaciones electrónicas iFixit publica un artículo con el desmontaje, pieza por pieza, del nuevo iPad. Gracias a ellos podemos comprobar todos los datos que sobre el mismo ha proporcionado Apple, y descubrir otras partes menos populares que hacen que el iPad sea lo que es.
Entre los detalles destacados por iFixit lo más llama la atención, al menos por las disputas legales que suelen tener, es la pantalla Retina que, según su número de serie y al menos en estos primeros lotes, está fabricada por Samsung como ya anunció la compañía surcoreana. Se espera que tanto LG como Sharp también fabriquen estas pantallas para Apple en cuanto se pongan al día en el control de calidad de su producción.
Otro de los componentes claves del nuevo iPad es el procesador A5X que, a juzgar por la fecha impresa en el mismo habría sido fabricado durante la primera semana de enero, lo que da una muestra de la velocidad con la que se terminan y se ensamblan los iPad.
Otro de los chips interesantes que incorpora es el encargado de administrar la conexión Wi-Fi/Bluetooth en el nuevo dispositivo de Apple. En este caso se trata de un chip de Broadcom BCM4430, que permite que el nuevo iPad sea compatible con el Bluetooth 4.0 de bajo consumo.
El nuevo iPad también incorpora 1 GB de memoria RAM, como se esperaba, en dos chips independientes de Elpida. Y la memoria flash (de 16, 32 o 64 GB) está fabricada por Toshiba aunque Apple suele tener varios proveedores de estos componentes para obtener mejores precios y prestaciones.
El último detalle del desarmado del nuevo iPad más significativo es la batería, que es hasta 70 % más grande que la del iPad 2 y que, sin duda, es la principal responsable del ligero aumento de peso y de grosor del nuevo modelo. Se especuló con que Apple había desarrollado una tecnología de optimización del rendimiento de este tipo de baterías pero, a la juzgar por el tamaño de la nueva, parece que no ha sido así.