La información que se genera en una empresa día con día es inmensa. Y esto no sólo se refiere a los datos generados por computadoras, sino a un gran número de fuentes como redes sociales, teléfonos inteligentes y sensores que, en muchos casos, se convierten en el activo más valioso de una organización. Pero, ¿qué hay de la “información no estructurada”?

Este término se aplica a todos aquellos datos que “no se administran”, tales como los miles de documentos en papel —que carecen de una copia digital—, así como las llamadas telefónicas, los correos electrónicos, los mensajes por diferentes servicios de comunicación, y un largo etcétera. En otras palabras, es toda aquella información que se encuentra fuera de una base de datos y en desconocimiento total del análisis.

Según datos proporcionados por Kodak Alaris, actualmente la información no estructurada constituye el 70% de todos los datos dentro de una empresa. Esta cifra se refleja a nivel mundial, sin importar el giro o tamaño de la organización. “Inclusive en organizaciones más avanzadas, donde la digitalización y todos estos temas tienen una penetración grande, siguen las tasas de crecimiento del uso de papel año con año”, afirmó Daniel Carrillo, Gerente de Ventas para Kodak Alaris en México.

Al participar en la mesa redonda “El rol del CIO como estratega para implementar Big Data”, organizada por CIO México y con el patrocinio de Kodak Alaris, Carrillo señaló que durante décadas se ha separado al departamento de TI de todo lo relacionado con el manejo y control de documentos físicos, incluso de aquellos que “nacen de forma digital” y terminan plasmados en una hoja, tales como los documentos en formatos Word, Excel o PDF.

“Esa información está ahí y puede representar una ventaja para nosotros, pero no se está aprovechando; no la puedo explotar, ni hacer inteligencia de negocio. Tampoco puedo mejorar mi servicio al cliente debido a que está inaccesible cuando se quiere procesar”, aseveró Carillo. El modo en que las organizaciones utilicen esa información, “que hasta ahora ha permanecido en el olvido”, dijo, será la base en la diferenciación ante la competencia y la satisfacción del cliente. Entonces, ¿cuál es el verdadero reto del CIO como líder de este tipo de proyectos, enfocados al manejo y utilización de grandes volúmenes de datos?

Eliseo Vivas, Director General Adjunto de Infraestructura y Operación de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores, dijo que esta dependencia federal ya se encuentra manejando datos estructurados, mismos que son recolectados desde diversas fuentes y en la forma como el área de TI las requiere. “Con el tema de la Reforma Financiera, hemos incrementando en un 60% la recopilación de información. Estamos creciendo en (capacidad de) almacenamiento y en la clasificación de los datos. Hemos logrado reducir la cantidad de Excel que usábamos de 8 a 1 y podemos ahora ver todas las caras de la información y obtener datos muy rápido”. De acuerdo con el directivo, los procesos se han reducido de semanas a un solo día, así como la cantidad de reportes requeridos.

Algo similar ocurrió en Financiera Planfia. Su Director de TI, Julio Hernández, dijo que esta empresa ha podido abatir el tiempo de aprobación de un crédito de dos días a sólo dos minutos. “Estos avances se lograron por el buen procesamiento de la información, y a un modelo de negocio que se desarrolló internamente, por el cual podemos hacer una consulta prácticamente en tiempo real, determinando las condiciones como le podemos entregar al cliente en función de estas variables. De esta forma, se determina su nivel de riesgo y se le brindan alternativas de crédito”.

Por su parte, Marco Antonio Torres, Director de TI de Grupo Autofin México, externó que cuentan con un área de Inteligencia de Negocios, que es básicamente estadística y se encarga de recolectar y almacenar información de diversas fuentes digitales. Dijo que ahora se pretende recoger datos provenientes de sensores que generan información sobre las preferencias de los consumidores de servicios. Esta información será recolectada por un año para, posteriormente, adoptar una estrategia de Consumer Experience de Big Data. “Por ahora, el Big Data es aprendizaje y consiste en recolectar toda una ola de información para empezar a aprender de ella y de su comportamiento,” afirmó.

Asimismo, Gilberto Gonzaga, Director Corporativo de TI en Servicios Administrativos Peña Verde (SAPV), afirmó que aún no cuentan con una estrategia definida de Big Data, debido principalmente a la falta de información estructurada, ya que la mayoría de su data está en papel. Sin embargo, dijo, se está implementando una iniciativa ‘paperless’, con lo que también se dará un paso hacia ese camino, al introducir toda la inteligencia en la parte documental y al optimizar formatos, para obtener información estructurada. “Estamos trabajando en la información que ya tenemos de algún modo digitalizada, para empezar a extraerle valor y (aplicarle) análisis”, comentó.

Los participantes en esta mesa redonda señalaron que no se trata sólo de recolectar y analizar datos, sean estructurados o no, sino que antes de apostar por la implementación de Big Data, la empresa debe tener una estrategia bien definida, enfocada a cumplir objetivos específicos de crecimiento, para evitar que estos esfuerzos fracasen.

La importancia del personal capacitado
Coincidieron en que adentrarse en el mundo de Big Data no es una tarea fácil, podríamos decir que el área de sistemas de TI no puede hacer todo, haciendo necesario contar con personal capacitado en el área, siendo otro de los factores clave para el éxito en las estrategias de Big Data. Fueron pocos los asistentes quienes afirmaron estar seguros de contar con este tipo de personal especializado. La mayoría lo ha tenido que hacer por iniciativa propia.

Marco Antonio Torres, de Grupo Autofin, explicó que están preparando a un selecto grupo de ingenieros para que sean científicos de datos certificados mediante un diplomado, gracias a una beca otorgada por el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), mediante la cual se les ha brindado apoyo económico durante su estancia en Japón por casi un año, con goce de sueldo por parte de la compañía.

Otra de las estrategias importantes para capacitar al personal es precisamente la búsqueda de un ‘sponsor’ que impulse este aprendizaje, como es el caso del Conacyt. “Hoy en día en muchas organizaciones no existe la Inteligencia de Negocios y se hace a través de las agencias de Marketing. Es muy importante tener a personal enfocado hacia un objetivo del negocio, que genere mayores ventas o reduzca costos, porque esto muchas veces no se puede hacer solo”, comentó Eduardo Nieto, CIO en Grupo Asesores en Negocios.

Al respecto, José Vargas, Director de TI en la empresa Administración y Análisis de Activos Inmobiliarios, resaltó lo difícil que es esta labor para un CIO, sobre todo por el reto que representa demostrar el retorno de inversión (ROI) a la Gerencia y justificar cada gasto de capacitación. “En las compañías difícilmente podemos tener este tipo de laboratorios de análisis de datos, ya que es costoso, no sólo en cuestión de dinero, sino también en tiempo y esfuerzos”, opinó.

Por su parte, Blanca Sámano, Directora de TI de Aon Risk, afirmó que el área de TI normalmente se ve como un sector dedicado al share services, a la reparación de servicios técnicos, dejando muchas veces poco tiempo a la innovación. “Los CIO debemos estar más tiempo en la planeación de nuevas estrategias, en vez de estar checando la operación del día a día, pues esta labor debe absorber a lo mucho un 10% de nuestro tiempo. Una de nuestras principales funciones es precisamente eso: ver a futuro y planear a corto y mediano plazo lo que sigue en innovación”, puntualizó.

Listos o no para el Big Data?
La información para cualquier empresa, sin importar su tamaño o giro, es lo que muchos expertos han denominado el “oro digital”. Y así como lo requiere este metal precioso, es necesario “tallar y pulir los datos” para determinar cuáles son los que en realidad y beneficiarse de sus riquezas. “Creo que ahora es el momento estratégico para que las empresas mexicanas comiencen con una estrategia de Big Data”, recomendó Marco Antonio Torres, de Autofin.

Empero, Julio Hernández, de Financiera Planfia, aseveró que, si bien el Big Data ya es una realidad, el reto para el CIO no es pensar si debe o no adoptarse esta estrategia, sino el modo como debe hacerlo, pasando de ser una opción a una exigencia de la industria. “Nuestros usuarios nos demandan información, por lo cual, el reto es procesar los datos de manera adecuada y a corto plazo”.

Luis Reyes, CIO para Latinoamérica de Willis, compañía de seguros y administración de riesgos, afirmó que, sin importar si se ve al Big Data como una realidad o un plan a futuro, se debe seguir esta tendencia y “aunque no podamos tener el día de mañana la estrategia de Big Data ya ejecutada en la empresa, sí debemos seguir la tendencia, tener este pensamiento en la mente y enfocar nuestras decisiones para llegar a esto”, comentó.

Tener clara la estrategia Big Data en el negocio y saber perfectamente cómo es que ésta ayuda a cumplir con los objetivos de la empresa, esa es la clave. “Podemos hacer inversiones importantes en tecnología, pero si no tenemos bien delimitadas las estrategias y hacia dónde queremos ir, qué es lo que esperamos de Big Data, una definición de objetivos, etcétera, difícilmente se verá un valor agregado o un ROI. Son puntos importantes que debemos definir ante este tipo de proyectos”, señaló Julio Hernández, de Planfía.

Los participantes en la mesa redonda coincidieron en que el CIO debe tener bien definido el tiempo que le va a dedicar a esta implementación y saber qué tanta importancia le va a dar a este proyecto por encima del resto de las actividades.

“Debemos determinar qué tanto de tu agenda le dedicas a este proyecto. Los CIO normalmente no valoran como un tema estratégico a la tecnología, pero ésta es la que ha hecho los cambios en grandes compañías. Si le preguntas a un director general, posiblemente él no lo percibió de este modo. Apreció el cambio como una ‘estrategia’, no como una consecuencia tecnológica”. La labor de un CIO, en buena medida, consiste en hacer que se comprendan los alcances que ha tenido el trabajo del área de TI, comentó Carlos Lara, Director Regional de Desarrollo de Aplicaciones en MetLife México.

Cabe destacar que todos los asistentes estuvieron de acuerdo sobre la importancia que tiene la correcta gestión de la información y en que la respuesta para lograr la eficiencia operacional está en los procesos.

– Karina Rodríguez, Computerworld México.