El Voyager 2, una de las dos sondas espaciales de la NASA que viajan más allá de la Tierra, cumple 36 años en el espacio este martes.
La sonda espacial, que se lanzó el 20 de agosto de 1977 desde Cabo Cañaveral, Florida, a bordo de un cohete Titan-Centaur, está a más de 9 mil millones de millas (14,484 millones de kilómetros) de distancia del sol, según la NASA.
El Voyager 2, que trabaja en conjunto con su compañero el Voyager 1, se lanzó para explorar más allá del sistema solar. Ambas sondas espaciales ya han sobrevolado Júpiter, Saturno, Urano y Neptuno, junto con 48 de sus lunas y sus campos magnéticos.
El Voyager 2 es la única sonda de la NASA que ha visitado y explorado Urano y Neptuno.
En 1990, el Voyager 1 y el Voyager 2 se embarcaron en la misión de entrar al espacio interestelar, el espacio entre los sistemas de estrellas de una galaxia.
La NASA informó que ambas sondas espaciales siguen enviando información científica sobre lo que los rodea a través de la Deep Space Network, una red internacional de grandes antenas e instalaciones de comunicación.
Actualmente, existe un debate científico sobre dónde se encuentra el Voyager 1.
A finales de junio pasado, la NASA reportaba que la Voyager 1, que se lanzó el 5 de septiembre de 1977, se estaba acercando a las fronteras del sistema solar, volando cerca de la heliósfera, que es semejante a una burbuja alrededor del sol. La sonda espacial está tan cercana al límite del sistema solar que está enviando más información sobre partículas cargadas desde fuera del sistema solar y menos desde su interior, de acuerdo con la agencia espacial.
Sin embargo, un equipo de investigadores de la Universidad de Maryland reportó la semana pasada que creen que la sonda espacial ya ha abandonado el sistema solar y que ha entrado al espacio interestelar.
De acuerdo con los investigadores de la universidad, el Voyager 1 ha comenzado la primera exploración de nuestra galaxia más allá de la influencia del sol.
A pesar del debate sobre el Voyager 1, los científicos parecen coincidir que el Voyager 2 sigue dentro de la heliósfera.
— Sharon Gaudin, Computerworld