Una encuesta entre los responsables de la toma de decisiones tecnológicas en grandes y medianas empresas encontró que la adopción de IoT llegará a la gran mayoría de las empresas en los próximos dos años, pero muchos de esos negocios aún no están listos para enfrentar el cambio.
Un aspecto importante del problema es la llamada “brecha de capacitación”. En efecto, de los 500 profesionales de la tecnología involucrados en IoT, sólo el 20% dijo que “tenían todas las habilidades que necesitaban” para implementar con éxito los proyectos IoT planificados de su organización.
Los otros cuatro de cada cinco encuestados en la encuesta realizada por Vanson Bourne y respaldada por la compañía británica de comunicaciones por satélite Inmarsat manifestaron que tenían algún grado de necesidad de habilidades adicionales de IoT.
Los científicos de datos, los profesionales de seguridad y el personal de apoyo están muy demandados entre los negocios habilitados para IoT, según el estudio.
Eso está provocando una gran cantidad de subcontratación y asociaciones. Sólo el 15% de los encuestados dijeron que planeaban desarrollar y desplegar sus soluciones IoT completamente internas, mientras que el 74% dijo que tenía planes definitivos de trabajar con socios externos para manejar parte de su carga de trabajo de IoT. “Desarrollar nueva tecnología es complejo y se basa en muchos tipos diferentes de habilidades y experiencias”, afirman los investigadores. “Los proveedores de infraestructura de red confiables y que pueden operar en cualquier parte del mundo necesitan trabajar estrechamente con las empresas de los usuarios finales para asegurarse de que entienden sus necesidades operativas”.
Casos de uso del IoT
Lo que estas compañías planean hacer con la tecnología IoT varía, pero algunos casos de uso son más comunes que otros. En particular, la encuesta encontró que el monitoreo de la energía y el uso de materiales a través de tecnología inteligente eran metas casi universales entre los encuestados. Más del 90% dijeron que planeaban utilizar dicha tecnología en los próximos dos años. La gestión de la seguridad, la automatización de procesos de negocio y los controles de área amplia, como la gestión de vehículos y dispositivos, no estaban muy lejos.
El informe también analizó varios verticales para los cuales el Internet de las Cosas es de particular importancia.
La agricultura, por ejemplo, está comenzando a utilizar tecnología de localización de precisión, sensores de suelo y análisis avanzado para maximizar los rendimientos e identificar maneras de operar más eficientemente, ante el desafío cada vez más duro de alimentar a una población que crece a un ritmo acelerado.
Finalmente, el sector energético está trabajando para superar la conectividad y otras cuestiones para operar granjas solares, turbinas eólicas y otras instalaciones de producción con la máxima eficiencia.
Jon Gold