En 2011 Google confirmó la adquisición de Motorola en una operación que se cerraba por 12,500 millones de euros. Google se hacía con uno de los fabricantes de dispositivos con más trayectoria en el sector, lo que para muchos podía cambiar toda la industria. La posibilidad de que Google entrara de forma directa en el mercado como fabricante era un cambio de paradigma en toda regla.
Sin embargo, según se fueron facilitando detalles de la operación se comprobó que Google estaba interesada, principalmente, en la cartera de patentes de Motorola. En un momento en el que la propiedad de las tecnologías registradas se ha convertido en imprescindible, solo hay que ver los múltiples enfrentamientos legales por esta cuestión, Google se reforzaba en este campo con las 17 mil patentes de Motorola.
Desde que se anunció el acuerdo, la operación pasó por los reguladores de los distintos territorios de todo el mundo, pero Google no ha especificado sus planes para la compañía. Lo cierto es que en casi un año Google no ha especificado si piensa lanzar dispositivos propios fabricados por Motorola y los últimos rumores de nuevos ‘tablets’ y ‘smartphone’ no apuntan en esa línea. Esa falta posiblemente es un síntoma de que Google tiene planes para Motorola más allá de convertirla en una división de su estructura.
Con la incertidumbre sobre los planes de la compañía para Motorola, The Wall Street mencionó sobre un rumor que parece que explica las intenciones de Google. Según el diario estadounidense, Google intentó vender la división de hardware de Motorola a la compañía china Huawei. Parece que ya habría habido un acercamiento entre ambas compañías, en el que Google habría solicitado una cantidad muy elevada a Huawei para vender la división de Motorola que se encarga de la fabricación.
Por el momento esto es un rumor que parece que está teniendo mucha difusión en Asia, pero los analistas ya han valorado como posible este movimiento. Muchos ven realista que Google haya intentado o intente desprenderse de la división de hardware de Motorola. La compañía realizó la compra por las patentes, que ya están en su poder, de manera que no tendría intención de convertirse en fabricante. De esta manera, Google podría conseguir parte de lo que pagó por Motorola gracias a un acuerdo, en este caso, con Huawei.
Además de que el verdadero interés de Google fuesen las patentes, muchos apuntan a que Google preferiría no posicionarse como fabricante para no crear problemas con las compañías que usan Android. Si Google decidiese diseñar y fabricar sus propios dispositivos, empresas como Samsung, HTC o LG podrían desconfiar en el uso de Android, lo que sin duda afectaría a sus resultados. Esta posibilidad ya se había dejado a entrever en el momento de la compra de Motorola, cuando Samsung aumentó su apoyo a otras plataformas como Tizen o Bada.
Por último, también se especuló con que la intención de Google con esta operación sería la de deshacerse de las plantas de fabricación, el personal y el stock de dispositivos de Motorola que tiene actualmente. Estos costos podrían suponer un lastre para Google, que hasta el momento ha preferido trabajar con otros fabricantes en lugar de hacer sus propios dispositivos.
Todos estos rumores dieron pie a The Wall Street a sus especulaciones, que han tenido un gran eco entre los expertos y analistas. Lo cierto es que por el momento no hay nada oficial sobre esta operación, pero cada vez parece más evidente que antes o después Google tendrá que pronunciarse sobre sus planes para Motorola.
