“IBM mantiene desde su nacimiento en 1911 un compromiso a largo plazo con la sociedad”. Así entienden en IBM, bajo la batuta de Stanley S. Litow, presidente de la Fundación IBM y vicepresidente de Ciudadanía Corporativa del gigante azul, su cultura corporativa y la interrelación entre el mundo de los negocios y la sociedad de la que se nutre. “Ya en 1914, IBM contrató a la primera persona discapacitada de su plantilla –un invidente-,explican desde la empresa, “y ahora IBM ha renovado este compromiso formulando su visión “Planeta Más Inteligente”, con la que a través de sus tecnologías de la información pretende ayudar a resolver las ineficiencias existentes en el mundo”.
En ese sentido, la empresa materializa su compromiso con la comunidad a través de programas concretos aplicados a resolver cuestiones sociales como el cuidado del medio ambiente, desarrollo económico, educación, salud y cultura.
Iniciativas como “Corporate Service Corps” permiten contribuir al desarrollo económico de los países emergentes aportando consultoría de alto valor (programa en el que han participado más de mil 400 profesionales han participado en unos 140 proyectos en 30 países, de los cuales 22 españoles que han acudido a Chile, Ghana, China, India, Tanzania, Filipinas, Camboya y Vietnam), mientras que IBM apoya también programas educativos para adolescentes (programa Stem) o acerca de pupitres electrónicos.
Investigación médica y ciudades inteligentes
World Community Grid es el paraguas bajo el que IBM ha puesto en marcha una iniciativa para aprovechar la capacidad no utilizada de las computadoras personales de particulares y empresas (durante las horas que no se trabaja en la oficina) para crear una red mundial de computadoras dedicada a investigar sobre enfermedades, desastres naturales y problemas medioambientales.
En la actualidad, esta red está contribuyendo a la investigación científica en proyectos sobre nuevos tratamientos contra el SIDA y el cáncer, como es el caso del proyecto “Clean Energy Project”, cuya misión es encontrar nuevos materiales para la próxima generación de células solares y poder construir dispositivos donde almacenar la energía.
Por último, pero no menos importante, es el proyecto Smarter Cities Challenge, un concurso-desafío que pretende fomentar y mejorar los sistemas y procesos urbanos de 100 ciudades del mundo. Se materializa a través de la aportación de servicios y tecnologías de IBM, cuyo valor en total equivale aproximadamente a 50 millones de dólares y la cantidad estimada que se asigna a cada ciudad es de hasta 400 mil dólares.