El mundo avanza a un ritmo vertiginoso y, para los líderes de tecnología, este cambio constante es tanto un desafío, como una oportunidad de evolucionar y anticiparse a las revoluciones que están por venir en esta materia, mediante la gestión óptima de las tendencias tecnológicas emergentes. En este contexto, lo principal recae en desarrollar la capacidad de equilibrar la innovación, la seguridad y la sostenibilidad.
El objetivo es crear un entorno tecnológico no sólo eficiente, sino también humano, responsable y seguro. Para lograrlo, los CIO deben abordar una serie de imperativos estratégicos, como evaluar de manera constante la adopción de herramientas de inteligencia artificial (IA) en sus diversas formas, la computación cuántica y, especialmente, las interacciones hombre-máquina.
Estos avances tienen el potencial de transformar profundamente el panorama organizacional, desafiando los modelos tradicionales y, a la vez, abriendo nuevas áreas de riesgo y mejora.
De acuerdo con Gartner, las principales tendencias tecnológicas estratégicas para el futuro inmediato se centran en tres áreas clave que los líderes deben analizar:
1. Los imperativos y riesgos de la Inteligencia Artificial
En este apartado se colocan la IA Agentic, que con su capacidad de analizar datos y establecer objetivos, puede crear planes y ejecutar acciones con una supervisión mínima. Esto potenciará la productividad en los lugares de trabajo. Se estima que, para 2028, el 33% de las aplicaciones de software empresarial incorporarán IA agentica, frente a menos del 1% en 2024. Este cambio permitirá que aproximadamente el 15% de las decisiones laborales se tomen de manera “autónoma”.
Este avance requiere que los CIO adopten un enfoque integral hacia la gobernanza de la IA. Es crucial implementar plataformas que garanticen que la IA opere de manera ética, transparente y responsable. El verdadero desafío radicará en asegurar que la IA se utilice de forma justa, respetando los valores fundamentales de las organizaciones.
Uno de los riesgos más urgentes es la proliferación de campañas masivas de desinformación, que ya representan una amenaza global significativa. Estas campañas, que pueden volverse virales en las redes sociales, pueden causar pérdidas directas por fraude, boicots o daños a la reputación. Las organizaciones no solo deben ser capaces de verificar la autenticidad de la información, sino también anticipar cómo las herramientas de IA pueden ser utilizadas con fines maliciosos para generar caos o fraude.
2. Las nuevas fronteras de la computación
La computación cuántica es otra tendencia clave que está configurando el futuro. Se prevé que, para 2029, los avances en computación cuántica hagan insegura la criptografía asimétrica y, para 2034, totalmente descifrable. Por esta razón, los CIOs deben comenzar a prepararse para el impacto de esta tecnología en la seguridad de la información, adaptando sus sistemas a los nuevos estándares criptográficos que resistirán los futuros ataques cuánticos.
Asimismo, dentro de las nuevas fronteras de la computación, también destaca la necesidad de una computación eficiente en energía. A medida que las demandas tecnológicas crecen, también lo hace el consumo energético, lo que obliga a las organizaciones a considerar el impacto ambiental de sus operaciones tecnológicas. Los CIOs deben liderar la búsqueda de soluciones innovadoras para reducir la huella de carbono de sus centros de datos y operaciones. Tecnologías como la computación neuromórfica y cuántica, junto con sistemas de gestión de energía inteligente, jugarán un papel crucial en la creación de soluciones más sostenibles. Además, la computación híbrida, que orquesta múltiples tecnologías informáticas, será esencial para optimizar recursos y reducir el impacto ambiental.
El mercado está exigiendo un cambio hacia la sostenibilidad, y los CIOs deberán liderar este movimiento, no solo por responsabilidad ética, sino también como una ventaja competitiva estratégica.
3. La sinergia hombre-máquina
La sinergia hombre-máquina representa una de las tendencias más fascinantes y desafiantes para los CIO. A medida que los robots, la inteligencia artificial y las interfaces cerebro-computadora se integran más en nuestras vidas, el rol del ser humano en el trabajo cambiará de manera radical. En lugar de ser reemplazados por máquinas, los trabajadores comenzarán a colaborar más estrechamente con tecnologías avanzadas para obtener mejores resultados. Esta colaboración abrirá nuevas oportunidades para crear entornos de trabajo inmersivos, entrenamientos avanzados en realidad aumentada (AR) y la optimización de habilidades cognitivas, a través de tecnologías de mejora neurológica.
Para los CIO, la adopción de estos avances no solo implica la implementación de las tecnologías adecuadas, sino también la creación de una cultura organizacional que promueva la colaboración entre humanos y máquinas. Los robots polifuncionales, por ejemplo, están diseñados para realizar múltiples tareas, lo que cambiará la manera en que las empresas operan, especialmente en sectores como la manufactura y la atención al cliente. La clave será encontrar el equilibrio adecuado entre aprovechar el poder de estas tecnologías y preservar el valor humano en el entorno laboral.
Manuel Moreno, Chief Information Security Officer (CISO) en IQSEC.