Intel anunció el recorte de 12.000 empleos a nivel mundial en base a una reestructuración de sus operaciones y a la diversificación de sus áreas de negocio hacia entornos de IoT y el mercado de servidores. Los despidos representan aproximadamente el 11% del total de su plantilla.
Según el comunicado hecho público, la reestructuración se debe a una iniciativa con el fin de acelerar la transformación de la compañía. Intel contaba a finales de 2015 con una cifra aproximada de 104.800 empleados repartidos en 72 países, según el informe anual de la empresa. Sin duda, la desaceleración en las ventas de PC parece ser uno de los principales motivos de esta reestructuración, afectando directamente al negocio de chipset de Intel. Según datos de IDC, las ventas de PC a nivel mundial a lo largo del primer trimestre de este año ascendieron a 60,56 millones de unidades, lo que supone una disminución de un 11.6% frente al mismo trimestre del año anterior.
Según destaca la compañía, todo lo relacionado con el Data Center será el área que previsiblemente experimentará un mayor crecimiento en los próximos años, compensando el descenso en la venta de chipset y procesadores para el mercado de PC. Entre los posibles elementos que habilitarán el crecimiento destacan la memoria y la tecnología FPGA (field programable gate array), para lo cual, la compañía cuenta con la reciente adquisición de Altera, para la que desembolsó un total de 16.700 millones de dólares.
Intel trata de abrirse paso en el mercado de dispositivos móviles, especialmente en el de smartphone, donde la presencia de fuertes competidores le ha impedido contar con una cuota de mercado similar a la obtenida con los PC. Sus chips pertenecientes a la familia Atom también comenzaron a ganar presencia en el mundo de las tabletas, igualmente las últimas cifras de ventas de estos dispositivos vaticinan un declive en las ventas.
La gama de productos para servidores sigue siendo la más rentable para Intel, pero se encuentra también con una fuerte competencia de fabricantes rivales. Google, uno de los principales compradores de servidores a nivel mundial baraja la utilización de nuevos servidores basados en la arquitectura Power 9 de IBM, respaldando además el uso de los chip ARM de Qualcomm.
Brian Krzanich, CEO de Intel, está llevando a cabo una reestructuración en la gestión de la compañía. Recientemente nombró a un ex ejecutivo de Qualcomm, Venkata Renduchintala, para dirigir el área de PC, IoT, y el negocio del software. El responsable del área de movilidad, Aicha Evans, abandonó la empresa, y el jefe anterior de IoT, Doug Davis, está retirándose. Stacy Smith deja su papel de director financiero para encargarse de las ventas y operaciones relacionadas con la fabricación. Asumirá su cargo una vez que su puesto sea reemplazado.
La noticia de los despidos llega el mismo día que Intel ha hecho públicos los resultados correspondientes al primer trimestre, en el que facturó una cifra de 13.700 millones de dólares, un 7% más que los 12.780 millones del mismo período del año anterior, pero lejos de sus previsiones. El beneficio neto ascendió a más de 2.000 millones de dólares, ligeramente por encima de la cifra obtenida el año anterior, que fue de 1.990 millones.
Las recientes adquisiciones de Intel apuntan a su apuesta clara por el mercado de dispositivos IoT, donde la compañía podría encontrar grandes oportunidades. Además, tiene previsto aumentar las inversiones en soluciones dirigidas a Centros de Datos, soluciones de memoria y conectividad. En el segmento de cliente final también destaca la apuesta por las soluciones de equipos 2 en 1, entornos gaming y gateways para el hogar.
Es una información de Agam Shah, del servicio de noticias IDG News Service.