El crecimiento urbano acelerado ha generado un desafío para las ciudades: las islas de calor. Este fenómeno, es causado por la alta densidad de edificios, el uso excesivo de materiales como el asfalto y el concreto que absorben agua y retienen el calor, la falta de espacios verdes y cuerpos de agua en las ciudades, genera aumentos de la temperatura de hasta 10°C en zonas urbanas en comparación con sus alrededores rurales.
Estas variaciones térmicas, afectan principalmente a los niños pequeños, adultos mayores, trabajadores al aire libre y comunidades de menores ingresos, quienes son más vulnerables al calor extremo. Esta problemática puede llegar a ocasionar problemas de salud pública, provocando golpes de calor, problemas respiratorios y enfermedades cardiovasculares.
Desde un punto de vista ambiental, las islas de calor intensifican los efectos del cambio climático al aumentar las emisiones de gases de efecto invernadero. La mayor demanda de aire acondicionado incrementa el consumo energético, lo que eleva los costos de la electricidad y genera una mayor dependencia de combustibles fósiles, agravando el calentamiento global y convirtiéndose en un reto económico y social.
¿Cómo puede la IA ayudar a combatir este fenómeno?
A pesar de la complejidad de este problema, la Inteligencia Artificial puede desempeñar un papel crucial en la mitigación de las islas de calor urbanas. A través de modelos de aprendizaje automático, es posible pronosticar las temperaturas a microescalas dentro de una ciudad, identificar las áreas más afectadas y ayudar a los tomadores de decisiones locales a implementar soluciones efectivas. Entre estas soluciones se encuentra conexión de corredores verdes a las ciudades para ampliar la cobertura vegetal, así como la implementación de arquitectura bioclimática que optimice la regulación térmica.
Este año, el EY Open Science AI & Data Challenge brinda una oportunidad para abordar este desafío. Los participantes utilizarán las herramientas de IA para analizar datos satelitales y climáticos, pronosticar las temperaturas y desarrollar modelos que ayuden a mitigar el impacto de las islas de calor. Además, deberán presentar un análisis que explore cómo ampliar sus soluciones a otras ciudades y cómo estas pueden ser aplicadas por los tomadores de decisiones locales.
Gracias a estas herramientas de IA, es posible optimizar la planificación urbana de manera más eficiente, incorporando estrategias como la construcción de más espacios verdes, el uso de materiales reflectantes o de baja absorción de calor y la gestión inteligente de los recursos energéticos.
El desafío de las islas de calor no solo requiere soluciones innovadoras, sino también un cambio en la forma en que se planifican y gestionan las ciudades. La IA y el análisis de datos ofrecen un enfoque avanzado para abordar este fenómeno, permitiendo a las ciudades no solo mitigar sus efectos, sino también generar una estrategia que les permita adaptarse a largo plazo.
El éxito en la mitigación contra las islas de calor urbanas requiere un esfuerzo conjunto entre gobiernos, empresas y la comunidad científica para implementar soluciones sostenibles. En este sentido, es fundamental que la sociedad comprenda que la inteligencia artificial será una herramienta clave para enfrentar estos desafíos urbanos complejos. La transformación digital y la sostenibilidad urbana ya no son solo tendencias, sino una necesidad estratégica para las ciudades del futuro.
-Claudia Gómez, Socia de Consultoría, Data & Analytics en EY.