Contenido Exclusivo

“Jugar futbol con zapatos de plomo”: las áreas de TI en grandes empresas

No hace falta decir que, si quieres moverte con rapidez, no puedes tener exceso de peso. Sin embargo, esto es precisamente lo que padecen muchas grandes empresas en el área de TI: son lentas y pesadas.

Al menos, éste era el caso en la empresa de la que ahora soy el director de Tecnologías de la Información (CIO). Cuando me incorporé, la compañía afrontaba un importante reto de agilidad. La situación afectaba su capacidad para responder a las oportunidades del mercado, creaba internamente todo tipo de frustraciones a los usuarios, y era un serio obstáculo para la satisfacción de los clientes.

Al principio me sentía como si estuviera viendo a alguien jugar al futbol con zapatos de plomo y que yo debía solucionarlo… ¡también con zapatos de plomo!

El problema del CIO

No es que las grandes empresas ignoren que tienen un problema así. Todo el mundo habla sobre “optimizar la infraestructura”, pero ¿qué significa eso en realidad? Después de muchas noches sin dormir, me he dado cuenta de que “optimización” significa “optimizar para cambiar”, y no simplemente optimizar costos, prestaciones o consumo de energía.

Hoy más que nunca, es necesario que las grandes organizaciones activen sus aplicaciones de negocio con mayor rapidez. Sin embargo, en muchas ocasiones, su infraestructura heredada no puede hacerlo.

Los usuarios ya lo saben y están adoptando sus propias medidas. Hace poco, la responsable de Marketing de mi compañía me dijo a la cara que había abandonado los sistemas de TI de la empresa y estaba utilizando todo tipo de aplicaciones de nube como alternativa para conseguir sus objetivos de negocio.

Y no sólo los usuarios están buscando soluciones alternativas: también los departamentos de TI de las grandes empresas intentan contantemente introducir una mayor agilidad en su infraestructura existente.

Por ejemplo, en nuestra compañía teníamos un sistema de voz basado en un conmutador de 10 años de antigüedad, con teléfonos fijos de escritorio. Sin embargo, hoy todo el mundo utiliza sus smartphones porque, bueno, estamos en 2015. Los smartphones no se pueden integrar con nuestro conmutador, de modo que estábamos pagando dos veces por el servicio de voz: una, por la red fija, y otra, por la red que utilizan los dispositivos móviles.

He observado que éste es un problema común. Muy pocas empresas tienen la capacidad de integrar los teléfonos móviles en su infraestructura y hacer que funcionen como un sólo servicio. Es cierto que hay soluciones de software para telefonía (softphone), pero todo lo que hacen es añadir una “tercera capa”, lo cual significa que, al final, terminamos pagando tres veces por el servicio de voz. (Cuando le explico esto a nuestro director de Finanzas, puedo ver cómo cambia el color de su cara).

He utilizado un ejemplo de comunicaciones porque muestra el problema con claridad, pero estos mismos principios son aplicables de un modo más amplio a la red. Una red que impide el rápido despliegue de nuevas aplicaciones es una red que impide el desarrollo de toda la empresa.

¿Y cuál es la solución?

Creo que debe cambiar todo el concepto de infraestructura. Las grandes empresas necesitan algo que pueda soportar múltiples aplicaciones y que se pueda adaptar a medida que cambien sus necesidades.

Se trata de superar las restricciones de las soluciones de TI puramente físicas y aprovechar las tecnologías como las Redes Definidas por Software (SDN), que permiten crear una red virtualizada y flexible. Y también se trata de crear un punto común de integración de forma que no se tengan que realizar pruebas de todas las nuevas aplicaciones con todas las restantes aplicaciones que ya están implantadas. En pocas palabras, se trata de flexibilidad.

El otro día estaba hablando con un colaborador de soluciones, quien me explicó que, incluso con las aplicaciones SDN, la gente debe ampliar su forma de pensar. En efecto, las SDN no sólo se aplican en el centro de datos, sino que se pueden ampliar a toda la Red de Área Extendida (WAN) para proporcionar una única y verdadera red empresarial, es decir, desde la sede central hasta cada una de las sucursales.

Este tipo de enfoque podría proporcionar la clase de plataforma de la que estoy hablando: no sólo una más sencilla, sino también que se pueda gestionar de forma centralizada, con flexibilidad para evolucionar a medida que cambien las necesidades.

Y lo que es más importante, que nos permita a los directores de Tecnologías de la Información liberarnos de esos “zapatos de plomo” que tienen las redes e infraestructuras heredadas de nuestras compañías, para correr a la velocidad que necesitamos.

______________

-El autor de este artículo, Alex Warner, es CIO de Kromacom Electronic Consumer Division.

Lo Más Reciente

La digitalización ofrece mejoras en la gestión de casos en el sector público

Los factores macroeconómicos globales y locales que cambian rápidamente,...

Cómo impulsar el crecimiento de las empresas en la era de la IA

La inteligencia artificial está revolucionando los negocios. Sin embargo,...

Realizan el segundo Foro de Talento en Data Centers

La Asociación Mexicana de Data Centers, MEXDC, realizó el...

Newsletter

Recibe lo último en noticias e información exclusiva.

La digitalización ofrece mejoras en la gestión de casos en el sector público

Los factores macroeconómicos globales y locales que cambian rápidamente, siguen ejerciendo una presión cada vez mayor sobre el sector público de México. El gobierno...

Cómo impulsar el crecimiento de las empresas en la era de la IA

La inteligencia artificial está revolucionando los negocios. Sin embargo, muy pocos empresarios están adaptando sus empresas a este contexto, para lograr un crecimiento. Para...

Chivas Rayadas del Guadalajara consigue gestionar sus activos de TI de manera más eficiente

El Club Deportivo Guadalajara es uno de los más importantes en México. Con más de 500 colaboradores, requería herramientas para auditar su parque informático,...