La era digital finalmente ha puesto de rodillas al símbolo de la fotografía tradicional: Kodak presentó una solicitud de protección por bancarrota. Este jueves, Eastman Kodak Company y sus subsidiarias en Estados Unidos anunciaron que solicitarán protección por bancarrota del Capítulo 11 ante la Corte de Bancarrota de Estados Unidos del Distrito Sur de Nueva York.
También la compañía obtuvo una facilidad de crédito por $950 millones de dólares de Citgroup para poder seguir operando. Kodak cree que tiene liquidez suficiente para seguir operando su negocio durante el capítulo 11, y mantener el flujo de productos y servicios hacia sus clientes, así como pagar los salarios y prestaciones de los empleados.
Antonio Pérez, el CEO de Kodak, dijo en un comunicado que “Kodak está dando un paso importante para permitir a nuestra empresa completar su transformación. Después de considerar las ventajas del capítulo 11, el Consejo de Directores y la alta administración creen de forma unánime que este es un paso necesario y lo correcto para el futuro de Kodak”.
Esta decisión no es una sorpresa, pues hace un par de semanas, circulaban rumores de que Kodak estaba peligrosamente cerca de la bancarrota, y ahora parece que esos rumores eran ciertos. La compañía fotográfica de 131 años fue pionera en la fabricación de cámaras de película y fue un momento tan dominante en la industria de la película que la frase “Un momento Kodak” se usaba para referirse a un momento que tenía que ser recordado.
Desafortunadamente, Kodak, que alguna vez tuvo 90% de la participación de mercado en las ventas de película en Estados Unidos, ha estado luchando desde la introducción de las cámaras digitales – un producto que Kodak inventó en 1975.