Los contadores inteligentes con tecnología de monitorización de carga no intrusiva (NILM, Non-Intrusive Load Monitoring), que pueden analizar cargas de potencia y consumos individuales, hacen posible saber lo que se está haciendo y utilizando en el hogar. Estos sistemas pueden “mostrar cómo vas y vienes por tu casa”, según ha explicado la Casa Blanca en su reciente informe sobre las implicaciones del Big Data y la privacidad.
En este informe se exploran tanto los beneficios como los peligros creados por los nuevos sistemas, incluida la instalación ubicua de sensores en el Internet de las Cosas.
La preocupación de la Casa Blanca sobre la privacidad en el hogar se basa en una investigación de Stephen Wicker, profesor de Ingeniería Informática y Eléctrica de la Universidad de Cornell, y coautor de estudios que investigan las implicaciones de los “sistemas de demanda y respuesta” o sensores inteligentes. El trabajo de Wicker ha sido citado en el reciente informe de la Casa Blanca.
Los dispositivos eléctricos tienen firmas únicas, y si son suficientemente sensibles pueden “distinguir el microondas del refrigerador, o incluso la bombilla del baño de la bombilla del salón”, sostiene Wicker en una entrevista. La información que estos sistemas pueden descubrir puede ser útil e invasiva. Puede alertar a los propietarios de la casa sobre fallas en los electrodomésticos, así como informar a empresas comercializadoras de la edad y marca de los electrodomésticos, información que también puede utilizarse para recoger el estatus socioeconómico de un residente.
“El resultado final es que esta clase de datos revela muchas de las preferencias de las personas, su comportamiento, sus creencias, y debemos tratarlo convenientemente. No debería estar a la venta”, considera Wicker.
¿Tecnología intrusiva?
Los sensores y contadores inteligentes están pensados para reducir costos en energía eléctrica, como poner la lavadora en horarios nocturnos, por ejemplo. Después de describir la manera como un sistema de contadores inteligentes podría decir lo que alguien está haciendo en su casa, el informe de la Casa Blanca indica que una vez que alguien abandona la casa interconectada, “tecnologías de reconocimiento facial pueden identificarte en fotos on-line. Las tecnologías para llevar puestas (wearable) y siempre conectadas con audio y video, así como la llegada de nuevos tipos de dispositivos en red, ampliarán todavía más la recolección masiva de datos”, señala el informe.
Agrega que “este mar de sensores ubicuos, cada uno de los cuales con una utilización legítima, hace que la noción de limitar la recolección de información sea enormemente difícil, si no imposible”.
Wicker apoya el esfuerzo de la Casa Blanca por examinar la privacidad en estas áreas, y cree que los individuos necesitan mayor control sobre el flujo de datos que sale de sus casas. “No se deberían recolectar los datos de nadie, a menos que voluntariamente digan que sí”, concluyó el académico.