Actualmente se requiere de múltiples habilidades -conocimientos, experiencia, dominio de otros idiomas- para dar resultados en las empresas. En el abanico de profesiones y especialidades siempre hay un factor que se repite independientemente del tamaño de la empresa o el sector: los puestos clave están en manos de los más preparados. Los puestos ejecutivos son cada vez más escasos y solamente tienen lugar aquellos que demuestren que tienen la capacidad, visión y valores para ocupar dichas posiciones.
Hace muchos años bastaba con ser profesionista, integrarse a una compañía y quedarse trabajando ahí por décadas; actualmente hay ejecutivos veteranos que saben que no tienen asegurados sus puestos por una sencilla razón: Hay jóvenes inteligentes y muy bien preparados que están dispuestos a trabajar más horas y ocupar los puestos de jerarquía.
Así que la experiencia aunque es importante cada vez, hay más oferta que motiva los movimientos que tienen muchos alias como reestructura, reorganización, optimización de costos, outsourcing y reingeniería, entre muchos otros. Ahora bien, la situación simplemente se agudizara porque las cosas están cambiando y cada vez más rápido. Esto se puede multiplicar tranquilamente al menos por dos en la industria de TI.
De acuerdo con la Dra. Ingrid Kirschning, Directora de Educación a Distancia de la Universidad de las Américas Puebla, “Un CIO es una persona en un puesto estratégico de cualquier organización, quien debe tener una visión amplia, o big-picture thinking, del uso/aplicación de la tecnología en los procesos de la organización y su escalabilidad para poder trazar el camino de la organización hacia el futuro”. El CIO requiere conocimientos para implantar soluciones complejas como Business Intelligence (BI), CRM, ERP y más, por lo que necesita involucrarse en estrategias de negocios y saber administrar procesos, así como comprender las relaciones con el cliente, conocer la estructura organizacional de la empresa y los requerimientos de cada departamento, debe desarrollar estrategias en línea, estar al día en tecnología de la información y de comunicación, etcétera.
¿Es necesario?
La preparación profesional de hace cinco años hoy es obsoleta, por lo que estudiar un posgrado le da principalmente los siguientes beneficios:
• No importa el área en que obtuvo su licenciatura ni la experiencia práctica que ha acumulado, en un posgrado podrá complementar y actualizar sus conocimientos y competencias. Por ejemplo, en administración, negocios, tecnología móvil, por mencionar algunas, o incluso un área más específica relacionada al negocio en el cual se desempeña, ya sea del sector público o privado, enfocado a la educación, manufactura, salud, etcétera.
• Estudiar y aplicar lo aprendido en clase le provee de más experiencia y confianza en la aplicación de esos conocimientos, al enfocarlos a problemas reales de su entorno laboral.
• Generar nuevas relaciones con compañeros de estudio.
• Reconectar con el ambiente académico y los nuevos métodos de enseñanza-aprendizaje que puede aplicar con su equipo de trabajo, además de que cambia de ambiente (sale de la oficina y conoce gente nueva) y eso siempre ayuda a activar la creatividad.
En mi experiencia de más de 24 años y al menos 12 como CIO, sé que hay que leer libros y aplicarlos en diferentes ámbitos (estrategias, tendencias, mejores prácticas de CIO en otras latitudes, biografías, negocios, formación y más); en nuestro campo las reglas cambian drásticamente cada 14 meses y aquel que no se actualiza o que no domine el idioma inglés al 100% será una especie en extinción.
Los jóvenes egresados de hoy dominan dos idiomas adicionales al español, tienen certificaciones diversas y están dispuestos a trabajar por sueldos que “te hacen levantar la ceja”.
Hoy los CIO deben saber utilizar el EBITDA, CAPEX, OPEX, P&L, además de las últimas tendencias en seguridad. Hay casos en los que lo crítico no es lo que conoces sino lo que no conoces y no dominas. Si piensa que nada va a pasar por sus buenas relaciones o su pelo blanco, piénselo dos veces; hay adquisiciones, fusiones y demás todos los días. Hay cientos de ejemplos de gente capaz que hoy no tiene empleo o que hoy esta como asesor porque lo alcanzo el destino. Sin ser irreverente aquí, es como una jungla y sólo sobreviven los mejores.
Estudiar una maestría ayuda a uno a actualizarse, le brinda una visión más amplia del campo de acción, le permite intercambiar experiencias con académicos y otros colegas estudiantes que ocupan puestos ejecutivos en otras empresas de rubros muy distintos, le obliga a ejercitar el músculo llamado cerebro, le fuerza a leer y a adquirir conocimientos.
Yo voy por mi segunda maestría, y lo estoy haciendo porque también imparto clases y veo a jovencitos con habilidades, que hablan tres idiomas y tienen conocimientos que ni remotamente teníamos los graduados de la década de los noventa. La única ventaja que tienen los veteranos es temporal y se llama experiencia, en el mundo de TI donde hay jóvenes genios en sus veintes exitosos que ofrecen soluciones de hardware y software robustas e inventos como Facebook, que surgió en 2004 y hoy forma parte de las vidas de muchas personas y los negocios.
Demanda en aumento
De acuerdo con la Dra. Diana Bank, “Un ingeniero necesita un MBA, para complementar su perfil. Durante cientos de años la ingeniería ha sido una parte muy importante de nuestra economía y mejora la manera en que vivimos. Sin embargo, el mundo hoy requiere que además de conocimientos matemáticos, tenga habilidades financieras y de negocio; el resultado es que al tener ambas habilidades se pertenece a un subconjunto elite donde es más sencillo encontrar un empleo bien remunerado, ya que la demanda de ingenieros de TI sigue creciendo”.
Compañías como Google, Apple y Facebook seguirá en busca de talento. A nivel internacional, un fenómeno similar está teniendo lugar. Muchos países, como China e India, carecen de los ingenieros para sus economías en expansión y México no es la excepción, señala.
Sin embargo, el cuello de botella que realmente ocurre cuando se le pide a un ingeniero hacerse cargo de los aspectos comerciales de una empresa, tales como ventas y mercadotecnia. En estos puestos de dirección, se requiere un conjunto diferente de habilidades. Estas incluyen la negociación, conocimientos de contabilidad, interpretación de propuestas presupuestarias, así como las habilidades principales de gestión de liderazgo, la toma de decisiones, con una visión para el progreso tecnológico.
Ya que este conjunto de habilidades combinadas son muy raras (que entienda la nomenclatura técnica así como el argot de mercadotecnia y ventas), cualquier persona con un grado de ingeniería informática y algunos estudios de negocios (de preferencia con un MBA) tendrá lo que se necesita para una carrera exitosa. Él o ella estará siempre en la demanda y será capaz de crecer en diferentes áreas de la empresa o institución así como ocupar puestos de dirección general.
Usted debe recordar que si bien uno de los pilares más importantes de nuestra civilización es la ingeniería del producto, el negocio es lo que trae estos productos innovadores a los clientes en todo el mundo. Uno no puede existir sin el otro. Estos ingenieros de TI que tienen ambos conjuntos de destrezas (añadir un par de idiomas) serán los que dirigirán las empresas más interesantes y exitosas, no sólo en términos económicos, sino también en términos de crecimiento personal.
Fernando Thompson es director general de Tecnologías de la Información de la Universidad de las Américas Puebla. Sígalo en Twitter: @thompsonfer; y lea su blog en http://cioexitoso.blogspot.com.
