Estamos viviendo una era emocionante en la que la Inteligencia Artificial (IA) ha pasado de ser un actor en segundo plano, automatizando procesos silenciosamente, a ser una pieza clave en como los humanos interactúan con la tecnología. Se trata de un cambio que transformará la manera en que vivimos y trabajamos para siempre; desde el smartphone hasta el cómputo personal.
De acuerdo con un estudio de McKinsey sobre el posible impacto de la IA generativa, se estima que esta tecnología, en su máximo potencial, podría añadir más de 4 billones de dólares anualmente a la economía global; para México las proyecciones también se muestran optimistas, calculando un crecimiento del sector a una tasa de casi 22% por año, hasta alcanzar un valor de más de 2,600 millones de dólares para el 2030.
Todo esto se sumaría a los 11 billones de dólares adicionales que, según las estimaciones, aportarían la IA no generativa y otras formas de automatización a nivel mundial. Esta increíble escala y el impacto potencial de la IA hacen que la cooperación internacional se vuelva esencial, particularmente en materia de regulación. Así que, aunque la cautela está justificada, también lo está el entusiasmo, porque los grandes cambios traen consigo grandes oportunidades.
Una nueva era para la PC
La mayoría de las experiencias de las personas con la IA generativa han sido hasta ahora a través de navegadores web y la nube, lo cual trae consigo todos los desafíos de confiabilidad, velocidad y privacidad que conlleva cualquier plataforma corporativa, de acceso abierto y en línea. Sin embargo, al colocar la IA generativa en la PC, los usuarios podrán obtener una nueva serie de beneficios que cambiarán la relación de las personas con el cómputo personal, desplegando un cambio de paradigma tan dramático y fundamental como el de la llegada del Internet.
Esta nueva era nos pone frente a la redefinición de lo que es y hace una PC, donde la IA permitirá que más personas pasen de consumidores a creadores tecnológicos.
De manera significativa, la seguridad, privacidad y confidencialidad necesarias por los ecosistemas empresariales también darán un salto significativo con la incorporación de IA Generativa, convirtiendo a la PC en un asistente personal inteligente y confiable, capaz de mantener la integridad de la información mientras realiza tareas como consulta de correos electrónicos o creación de informes y hojas de cálculo, apegándose siempre a los parámetros de acceso, normatividad y gobernanza de cada proyecto y organización.
Una nueva era para la creatividad humana
Hoy por hoy ya contamos con evidencia de los efectos positivos de la IA en la productividad y la calidad de los trabajadores, desde la creatividad y el pensamiento analítico hasta la competencia en la escritura y la persuasión: el uso de ChatGPT-4 aumentó significativamente el rendimiento, incrementando la velocidad en más del 25%, el desempeño calificado por humanos en más del 40% y la finalización de tareas en más del 12.
Ahora imagine el potencial que representa integrar IA dentro de las empresas, obteniendo respuestas a medida, a partir de datos de trabajo. Este despliegue no solo ayudará a analizar rápidamente grandes volúmenes de información, sino que podrá dar recomendaciones relevantes y optimizadas a partir del contexto. Ya sea que esté buscando información sobre los clientes, realizando evaluaciones financieras o creando una presentación, todo se puede hacer de manera más ágil, más completa y segura, con el poder de la IA local.
Del mismo modo que la IA se está usando para mejorar el rendimiento de hardware, los principales proveedores de software están desarrollando sus aplicaciones para aprovechar también las capacidades locales de procesamiento de IA, incorporándola en las funciones de las apps y programas que usamos diariamente. Es justo el campo del software donde la Inteligencia Artificial encuentra uno de los mercados más prometedores, al grado que México es el quinto país de la región con mayor adopción en los últimos dos años.
Tal escenario plantea que la IA conversacional, combinada con plataformas de desarrollo de “código bajo”, ayudarán a democratizar el desarrollo de aplicaciones, permitiendo que las personas conviertan sus ideas en nuevas soluciones de trabajo sin necesidad de ser expertos en lenguajes de programación.
Con esto, sin importar tu experiencia, podrás hablar con tu PC y crear un algoritmo o herramienta web y luego publicarla como un servicio.
Impulsar la transformación empresarial
Nunca habíamos estado tan entusiasmados con el futuro del cómputo personal como ahora, y con el poder de la IA para reinventar la PC tal como la conocemos. Tan solo en nuestro país se estima que, junto a Brasil, se concentran cerca del 95% de las patentes de Inteligencia Artificial en toda la región.
Las empresas deben comprometerse en utilizar esta tecnología en el trabajo, aprovechando lo último en IA generativa y aprendizaje automático para impulsar la transformación digital. En esta nueva era, para mejorar la forma en que trabajamos y vivimos, organizaciones como HP nos enfocamos en aprovechar estas nuevas soluciones para resaltar continuamente las experiencias de clientes y empleados que ofrecemos.
Por eso creemos que, con el adecuado enfoque ético y estratégico, esta es una revolución que puede beneficiar a todos.
Por Carlos Cortés, Director General, HP Inc. México.