La tecnología de la nube ha revolucionado el mundo laboral, permitiéndonos trabajar de maneras cada vez más innovadoras. A su vez, ha acelerado la productividad, tanto en ritmo como en eficiencia, habilitando la operación de los colaboradores fuera de la oficina de una manera completamente fluida.
Con el establecimiento de las modalidades híbridas, se ha transformado cómo nos acercamos y la forma en que percibimos el trabajo, estableciendo una relación simbiótica, donde las soluciones y servicios en la nube detonan nuevas oportunidades en los entornos empresariales, empoderando a la fuerza laboral a niveles que hace algunos años hubieran parecido imposibles y que hoy se han convertido en parte de lo cotidiano.
Este cambio ha marcado un parteaguas para las compañías que buscan mantenerse a la vanguardia tecnológica, convirtiendo a la transformación digital en un eje de su estrategia de negocios. Firmas como TelevisaUnivision han hecho de la nube un punto de acceso fácil y rápido a sus archivos, lo que resulta vital para la era del trabajo híbrido.
La organización dedicó gran parte de sus esfuerzos en migrar sus archivos a la nube, buscando dejar atrás los servidores físicos, y logrando resultados en pocos meses. En menos de tres meses han logrado migrar 300 servidores.
“La migración a servicios de Microsoft Azure y Microsoft 365 obtuvo un 91% de ahorro del 100% original que nos costaba la infraestructura on-premise”, aseveró Carlos Sosa, Líder de Arquitectura Empresarial, Estrategia Tecnológica y Desarrollo de Soluciones de TelevisaUnivision.
Estas migraciones permiten un ritmo de trabajo más fluido, que reduce la superficie de centros de datos, optimizando operaciones y acelerando el proceso de aplicaciones. Habilitan también que los trabajadores aumenten su productividad, ya que reduce el tiempo de inactividad debido a situaciones como latencia, o permitiendo que el equipo de IT dedique más tiempo a tareas de optimización y menos a tareas relacionadas con mantenimiento y revisión.
Tales estrategias incentivan los proyectos orientados a resultados, entregando recursos informáticos desde cualquier parte y facilitando el acceso de los colaboradores a datos y aplicaciones.
Otra compañía que se ha beneficiado de la nube es CEMEX, quienes han migrado sus aplicaciones a escala global, lo que les ha representado un aumento de productividad de entre un 40 y 70 por ciento.
Al ser una empresa internacional, los equipos que operan fuera de México habían reportado problemas de latencia en los servidores, por lo que una migración a la nube era fundamental tanto para asegurar el trabajo fluido de sus colaboradores, como para proveer experiencias satisfactorias para sus clientes.
Para lograrlo, uno de los principales criterios de decisión radicó en la integración de servicios, en especial en cuanto a la comunicación con SUSE Linux Enterprise, permitiendo un uso intuitivo de la información y reduciendo los silos. Esto les ha permitido incorporar algunas mejoras técnicas en el proceso, ayudando a reducir su huella en las aplicaciones de TI por un 25 por ciento, lo que resulta fundamental para consolidar su transformación en la columna informática de CEMEX. Del mismo modo, la migración también ha impulsado la reducción de costos, descartando alrededor de 400 servidores que no estaban en uso.
“El rendimiento de las aplicaciones integradas es un elemento esencial dentro de los más de 100 criterios que teníamos contemplados. Con la migración a Azure obtuvimos mejoras en rendimiento, seguridad, escalabilidad y servicios”, dijo Juan Vazquez, IT Architect de CEMEX.
El uso de plataformas de nube implica múltiples beneficios para las organizaciones, ayudando a hacer más eficientes los procesos y obtener, en consecuencia, ritmos de trabajo más estables. Con miras a las operaciones distribuidas, también representa la base de la colaboración de los trabajadores, ofreciendo experiencias intuitivas alrededor del mundo, sin sacrificar la productividad. Este tipo de herramientas no solo ahorra dinero gracias a la optimización, sino que reduce los gastos de la compañía al disminuir el número de servidores físicos y centros de datos utilizados por las compañías.