Rosstin Murphy, ingeniero de Software de IBM, piensa que la realidad aumentada (AR) supera la realidad virtual (VR). En su opinión, la naturaleza “transportista” de VR lo hace menos adecuado para las aplicaciones empresariales. “Te lleva y te envía a la luna o al espacio exterior o a un planeta alienígena”, dijo Murphy. “Pero la realidad aumentada es transformadora, transformará el mundo en el que ya está, y para un contexto de negocio, eso es exactamente lo que se quiere”.
Durante una charla en la Conferencia de Desarrolladores de Realidad Virtual en San Francisco, Murphy señaló que los auriculares AR permiten a los usuarios continuar interactuando con los objetos en sus escritorios, como teclados y teléfonos. Eso es importante, según él, para las personas que quieren hacer el trabajo mientras se aprovechan de los beneficios del nuevo hardware como el Microsoft HoloLens. “Es importante tener en cuenta que Microsoft, HTC, Oculus y otros compiten para ofrecer a las empresas nuevas y útiles herramientas 3D. La visualización de datos en tres dimensiones es increíblemente poderosa para los investigadores, y AR será más útil”, explicó el ingeniero.
El uso de AR para la visualización de datos permite a los investigadores y otros usuarios interactuar con los datos en una tercera dimensión.
Es un cambio que, dijo, sería importante para el análisis de conjuntos de datos complejos ya que la gente está actualmente atascada con la visualización en dos dimensiones. Un ejemplo que compartió fue un gráfico de los datos de la base de datos MNIST, que se utiliza para probar la capacidad de los sistemas de visión por computadora para analizar la escritura a mano. En 2D, parecía una mancha enmarañada, y algunas relaciones entre los puntos de datos se oscurecieron por completo. Ver el mismo gráfico en 3D permitió comprender qué nodos se conectan entre sí.
El ingeniero de IBM está trabajando en la construcción de software que toma datos de las herramientas de análisis de la empresa y permite a los usuarios visualizar en tres dimensiones. Murphy comenzó su trabajo de visualización de datos en realidad virtual, pero se trasladó a HoloLens bajo las órdenes de la dirección.
Según él, todavía hay trampas que deben ser resueltas ya que sólo puede usar un HoloLens durante 3 ó 4 horas al día antes de que su cuello empiece a doler.
El campo de visión del dispositivo sigue siendo una frustración y, además, encuentra el aparato incómodo para sus gafas.
Pero Murphy está optimista sobre el potencial de los HoloLens, especialmente cuando se trata de la inversión a largo plazo de Microsoft en el dispositivo.
-IDG.es