En ocasiones anteriores he mencionado que es vital para el CIO tener un posgrado, dominar el inglés al 100% y actualizarse de manera constante. También he pensado siempre que una persona sana es más productiva. Por definición, una persona sana es la que se alimenta correctamente, la que logra equilibrar su vida laboral y familiar, la que estudia continuamente, desarrolla su espiritualidad y que incluye el deporte en sus actividades de esparcimiento.
Una persona que hace deporte es disciplinada porque destina algunas horas de su día a ejercitarse. Muchos nos levantamos mucho más temprano que la mayoría de la gente para hacer ejercicio, o bien después de nuestras actividades diarias cuando todos los demás se van a descansar.
Conozco a muchos CIO que les gusta correr, hacer pesas, andar en bicicleta, jugar tenis, futbol o baloncesto; incluso, hay quienes son muy entusiastas y hacen actividades como el CrossFit, o participan en maratones o triatlones. En lo personal, amo el golf, que aunque no demanda gran esfuerzo físico, sí mucha constancia y paciencia.
Actualmente, además de que muchos headhunters buscan a una persona que no sea fumadora ni sedentaria, tienen en la mira a una que practique alguna actividad física de forma regular. Y esto se debe a varias razones, entre ellas:
1. Los deportistas tienden a desarrollar nuevas habilidades. A pesar de que un deportista sigue una rutina que específicamente debe realizar ese día, se le facilita mucho poder incrementar, por ejemplo, la velocidad y la coordinación motriz, lo cual se traduce en una vida productiva con capacidades para habilidades multifuncionales.
2. Se enfocan en las metas. Nadie se levanta el primer día y corre seis kilómetros, ni tampoco puede hacer una larga sesión de levantamiento de pesas de la noche a la mañana. Por el contrario, a base de constancia y una mejora gradual va elevando su desempeño; eso equivale a trabajar más inteligentemente, buscar ser más efectivos y más productivos.
3. Son disciplinados, y pese al dolor muchos vuelven a la actividad. En lo que se refiere al trabajo, eso se traduce en seguir realizando sus actividades sin descanso, e incluso en medio del fracaso, hasta que consigue alcanzar su objetivo. Los atletas son tenaces; nunca o rara vez se rinden. También tienen una fuerte ética de trabajo y la capacidad de respetar y hacer frente a los problemas inevitables de dolor temporal (lesiones/fracasos).
4. La gente que hace deporte es entusiasta y tiene la capacidad de automotivarse. Esto, sin duda, hace que una persona sea optimista. En todos lados hay problemas, y precisamente para eso nos contratan: para resolverlos. Una de las grandes ventajas es contar con ejecutivos que no necesitan que le echen porras, sino que por sí mismos sean capaces de tener un motor que los impulse.
5. Los deportistas saben trabajar en equipo. Cuando alguien practica deportes como el baloncesto, el volibol, el futbol americano, conoce perfectamente qué papel tiene cada jugador en lo individual, y cuáles son las características y posiciones del resto de los integrantes del equipo. Un jugador estrella puede lucirse y tener buenas estadísticas, pero un equipo estrella es el que gana los campeonatos. En momentos difíciles, cuando se va perdiendo o se comete un error, lo peor que se puede hacer es criticar o condenar a sus compañeros pues eso solamente alimentaría el desánimo y animadversión; por el contrario, tiene ayudar a levantarse y decirle la clásica frase: “Venga, a la otra. ¡Ánimo!”
6. Tienen una vida equilibrada. Normalmente, la gente que practica un deporte con regularidad tiene una vida equilibrada que les permite rendir, cuida sus horas de descanso, su alimentación, se hidrata – en concreto, tienen un cerebro activo. La enorme mayoría de los deportistas tienen una condición física excelente que no permite engañarse a sí mismo. Como dice la filosofía popular: “Cuando dejo de hacer ejercicio un día, yo me doy cuenta. Cuando dejo de hacer ejercicio dos días, mi pareja lo nota. Cuando dejo de hacer ejercicio tres días, todo el mundo lo nota”. De igual modo, para tener éxito en el ámbito profesional se requiere constancia. No hay atajos, el resultado se obtiene a partir un esfuerzo continuo, sobre todo en quienes buscan una trayectoria exitosa a largo plazo.
7. Se identifican con gente con los mismos objetivos. Ya sea en el club o en el gimnasio, buena parte de los compañeros que son profesionistas y hacen deporte tienen mentalidad empresarial, tienen una visión basada en objetivos y un halo de prosperidad y de progreso. Como dice el refrán, “Son toros para torear, no bueyes para arrear”. Son personas que hacen que las cosas sucedan a pesar de la adversidad y los contratiempos. Es gente acostumbrada a actuar pero con estrategia; quizá hasta un poco más acelerada que el promedio del Top Management.
Podría continuar describiendo más características, como el respeto al liderazgo y línea de mando así como no utilizar excusas para justificar no haber alcanzado un resultado o meta. Por supuesto, todas estas razones se aplican a una gran mayoría, y como en casi todo, hay excepciones. Y a manera de conclusión, creo que es mucho mejor tener a un deportista en el equipo que un workhaholic.
Por Fernando Thompson
Fernando Thompson es director general de Tecnologías de Información de la Universidad de las Américas Puebla (UDLAP). Sígalo en @thompsonfer y lea su blog en http://cioexitoso.blogspot.com.