La pandemia de COVID-19 ha impactado sobremanera en prácticamente todas las facetas de la vida y los negocios, y las TI no iban a ser menos. A medida que los cierres muchos negocios reinician su actividad, al menos de forma limitada, los ejecutivos de TI buscan una vuelta a cierta apariencia de normalidad.
Y, como en cualquier otro evento de esta escala, hay lecciones que aprender. Aquí están algunas de ellas, compartidas por los líderes de la tecnología de la información y otros expertos.
La agilidad organizativa comienza con la cultura
El trabajo a distancia es ahora un hecho, y para apoyarlo se requiere una estructura. Antes de la pandemia, muchas empresas experimentaban un aumento de los trabajadores a distancia, gracias en gran parte al mayor uso de la tecnología móvil y la nube. La crisis sanitaria hizo que el trabajo desde casa fuera la norma, y para muchas empresas el cambio podría ser a largo plazo, si no permanente.
“Una de las mayores lecciones que he aprendido de la pandemia es sobre la necesidad de que los líderes establezcan una estructura para trabajar a distancia, lo que incluye animar a los miembros del equipo a establecer e indicar las horas de trabajo en sus sistemas de calendario, y luego volver a establecer los plazos de los proyectos y los tiempos de cobertura del servicio de asistencia técnica para dar cabida a esta nueva matriz de disponibilidad”, explicó Wendy Pfeiffer, CIO de Nutanix.
“Sin esta estructura, los empleados tienden a seguir operando en modo de ‘emergencia’, sintiendo la necesidad de estar disponibles las 24 horas del día, los siete días de la semana. Así como permanecer en línea 24×7 no es bueno para los adolescentes, tampoco es saludable para nosotros”, agregó.
En consecuencia, la misión del CIO ahora se ha ampliado para permitir a los empleados ser productivos en su entorno doméstico. “Cuando fuimos por primera vez a distancia, vimos una disminución inicial de la productividad debido a que todos se ajustaron”, admitió Pfeiffer.
“Pero ahora que nuestros empleados están preparados para el éxito en casa, hemos visto un aumento de la productividad del 8%. En consecuencia, hemos aprendido que nuestros empleados trabajarán duro sin importar dónde estén, siempre y cuando les proporcionemos las herramientas y los recursos para que prosperen”.
La nube y la virtualización se han vuelto aún más críticas
Es evidente que los servicios en la nube han ido adquiriendo un papel cada vez más importante en las organizaciones en los últimos años. Pero la pandemia elevó el nivel de urgencia a un nuevo estadio, ya que las empresas se apresuraron a apoyar a legiones de trabajadores a domicilio, a desplegar y mantener herramientas de colaboración y a entregar más fácilmente aplicaciones, capacidad y almacenamiento a una fuerza de trabajo lejana.
En el Pittsburgh Technical College (PTC), la tecnología de virtualización, como las herramientas de escritorio virtual de VMware, ha ayudado a aquella institución a pasar sin problemas al aprendizaje a distancia, además de proporcionar puntos de acceso a Internet a los estudiantes y al personal que no tienen acceso a un acceso de alta velocidad.
“Nuestro equipo de TI pudo realizar la transición de los profesores, estudiantes y personal de forma rápida y sin problemas a un entorno de trabajo y aprendizaje a distancia”, explicó el CIO William Showers. “Una gran parte de nuestro éxito fue gracias a las inversiones previas y a los esfuerzos realizados para virtualizar nuestra infraestructura de TI subyacente”.
La infraestructura del campus está virtualizada en un 95%, incluyendo servidores y estaciones de trabajo. “Cuando tuvimos que hacer el cambio a trabajar a distancia, la única diferencia para el trabajador era que ya no trabajaba en su escritorio”, reconoció Showers. “Seguían teniendo el mismo software y la misma imagen de escritorio estandarizada”.
Eso no quiere decir que la transición no haya estado exenta de desafíos. “Varios de nuestros estudiantes viven en zonas rurales sin acceso a Internet de alta velocidad”, apuntó de nuevo Showers. “Para acomodar estos desafíos de conexión, nuestro equipo envió puntos de acceso a estos individuos para que puedan acceder a su entorno de aprendizaje virtual y mantenerse productivos hasta que el campus sea reabierto”.
Las organizaciones necesitan plataformas y estrategias de software flexibles
Los equipos de TI no tuvieron mucho tiempo para prepararse para los cambios monumentales causados por la pandemia, por lo que era vital disponer de un conjunto de plataformas de software que pudieran ser rápidamente implementadas y escaladas para apoyar las operaciones.
Un aspecto crítico por dos razones, admitió Scott Mastellon, comisionado del departamento de IT en el condado de Suffolk, Nueva York, un área que fue duramente golpeada por los casos de coronavirus. Primero, es importante poder implementar rápidamente la funcionalidad. En segundo lugar, y más importante, “me permite distribuir la carga de trabajo general entre el personal de mi aplicación para que un grupo no se vea totalmente abrumado”, reconoció.
Esto permitió a ciertos miembros del personal mantenerse “frescos” durante los tiempos difíciles y seguir siendo altamente productivos, constató Mastellon. “Sin las plataformas de proveedores como Salesforce, ServiceNow, Accela e Infor, todo el trabajo de aplicaciones para el condado habría dependido de su personal interno de desarrollo personalizado”, constató aquel especialista.
La necesidad de un enfoque centrado en las personas para la seguridad de la TI
Los trabajadores a distancia tienden a abandonar los procedimientos de seguridad que interfieren con su flujo de trabajo y su productividad, y como resultado a menudo están dispuestos a eludir los controles de protección de datos si pueden, admitió Vishal Salvi, CISO de Infosys.
“Las empresas se han centrado tradicionalmente en la creación de seguridad para los sistemas. Es hora de girar para centrarse en el desarrollo de la seguridad para las personas”. Los hackers se dirigen cada vez más a los trabajadores remotos, y es vital que estos empleados puedan trabajar de forma productiva sin que los procesos de seguridad se lo impidan, constató aquel especialista
Para evitar que los trabajadores remotos tomen atajos de seguridad, los equipos de TI necesitan equilibrar la seguridad con la experiencia del usuario y la productividad, reconoció Salvi. Por eso, los equipos de TI deben proporcionar una experiencia de trabajo racionalizada y sin problemas, a la vez que construyen controles de ciberseguridad transparentes.
La IA y el aprendizaje automático pueden cambiar el juego
Incluso antes de la pandemia, muchas empresas aprovechaban el potencial de la inteligencia artificial y las herramientas de aprendizaje automático como una forma de extraer un valor sin precedentes de los datos y mejorar los procesos. Para las empresas de industrias como la de la salud, las tecnologías abrieron rápidamente nuevas oportunidades para avanzar en la gestión de datos.
La innovación tecnológica puede ser contagiosa
Aunque puede ser difícil conseguir que los empleados que tienen una comprensión limitada de la tecnología la adopten, una vez que ven los beneficios, quieren más.
Por eso, un aspecto positivo que se puede sacar de la pandemia es que ha abierto los ojos de muchos sobre lo que la tecnología puede hacer y cómo puede ayudar a mejorar nuestra capacidad para completar nuestro trabajo. En consecuencia, y de cara al futuro, ahora ya contamos con gente que entiende los beneficios de la tecnología, con la consecuencia exigencia de innovaciones que eso conlleva.
-IDG.es