El servicio de mensajería BBM que tanto éxito cosechó entre los usuarios de los teléfonos BlackBerry en su época dorada, llega por fin a las dos plataformas móviles más importantes del momento, Android e iOS. ¿No es algo tarde?
Este fin de semana ya será posible descargarse la aplicación de mensajería BlackBerry Messenger en dispositivos Android e iPhone, con el fin de extender su funcionalidad al resto de plataformas, más allá de BlackBerry OS en la que tantos éxitos cosecho antes de la proliferación de WhatsApp. Sin duda, sería un gran paso si no fuera porque la plataforma de BlackBerry ha perdido muchos adeptos desde entonces, hasta tal punto que la mayoría de usuarios han adoptado otros servicios de comunicación y mensajería como WhatsApp, Line, WeChat o Tuenti entre otros, con lo que el porcentaje de adopción sería mínimo. En cualquier caso, BlackBerry no quiere perder el tren del mercado de la movilidad, y sigue luchando por mantenerse en esa tercera posición en la que lucha en participación de mercado junto con Windows Phone, por detrás claro está de los dispositivos Android y iPhone de Apple.
La descarga podrá realizarse en las tiendas App Store y Google Play de forma gratuita, con las funciones ya conocidas de chat de texto, además de poder compartir archivos como fotos y mensajes de voz. BBM permite al usuario saber que un mensaje ha sido entregado y leído, mostrando cuando un amigo está respondiendo. También destaca por la posibilidad de crear grupos de chat para compartir fotos o mensajes en los que pueden participar hasta 30 usuarios. Una función llamada Broadcast Message permite a los usuarios enviar un mensaje a todos los contactos de una sola vez. BBM utiliza un único PIN para autorizar el uso al usuario, con lo que se mantiene en mayor medida el anonimato del usuario sin necesidad de tener que facilitar el número de teléfono o dirección de correo a los nuevos contactos.
Según lo anunciado, la única plataforma móvil importante para la que no estaría disponible sería Windows Phone, sin planes por ahora para su desarrollo.
– Alfonso Casas