De acuerdo con cifras de Gartner, el negocio digital representa el 18% de los ingresos totales en las empresas, aunque la firma de análisis y consultoría predice un salto de 43% en este rubro para 2020. Tal incremento aún parece pequeño, pues las empresas digitales nativas como Uber, AirBNB y Etsy son todavía escasas, aunque son verdaderas “revolucionarias” del mercado TI.
Sin embargo, un estudio realizado por la empresa BMC en señala que sólo el 5% de los encuestados en 2015 había implementado plenamente los servicios digitales y las tecnologías móviles que hacen falta para crear nuevas fuentes de ingresos, abrir mercados nuevos y ofrecer mayor eficiencia operativa.
“Para el 2016 este número crecería significativamente en las empresas del ranking Fortune 500 y en las empresas tradicionales, a medida que aceleran la adopción de prácticas digitales para entrar en nuevos mercados, agilizar las operaciones en sus actuales líneas de negocio y fortalecer las ventajas competitivas que han construido durante años”, comentó Jorge López, director de México y Norte de Latinoamérica de BMC.
Esta empresa proveedora de soluciones de software para TI compartió sus predicciones respecto al entorno tecnológico en 2016 y cuál será su influencia en el desarrollo de las empresas, así como en el mejoramiento de diversos procesos de negocio.
Crowdsourcing, como principio
En primer término, señala que en 2016 el “lugar de trabajo” ya no será un “lugar”, ya que las empresas van a acelerar el cambio a un ambiente informático más similar al del consumidor, basado en la tecnología de crowdsourcing (la externalización abierta de tareas) y en roles que permitan a los empleados elegir las herramientas de productividad y tecnología que quieren usar, dentro y fuera de la oficina.
“Esto establecerá un nuevo estándar de TI para la distribución de servicios personalizados a los empleados, lo que les permitirá hacerse cargo de sus propias experiencias de trabajo”.
Velocidad de reacción, lo más importante
Por otra parte, BMC indica que el nuevo modelo de TI se centra en el tiempo de salida al mercado, el desarrollo y liberación de aplicaciones de manera acelerada (DevOps), y en una estrecha alineación con los negocios al interior de las organizaciones. Todo esto impulsa la necesidad de la automatización.
La velocidad de reacción es más importante que nunca, tanto para el desarrollador como para el director general, de manera que en el 2016 “un segundo se convierte en el nuevo minuto”, apuntó López, y agregó que las organizaciones que se preparan para las incidencias por adelantado, y tienen instalada una solución de desarrollo para implementaciones rápidas y automatizadas, “estarán mejor posicionadas para manejar estos problemas si se producen estas incidencias desafortunadas”.