Una de las industrias más contaminantes a nivel mundial es la de Centros de Datos, y también es probablemente la que más desarrollo presenta, pues en México creció 12% en el último año).
Según ICREA, estas grandes salas de cómputo despiden el 2% de la huella de carbono a nivel mundial y despilfarran cerca de 90% o más de su energía eléctrica.
Y México no es la excepción, ya que una mínima parte de los Centros de Datos están certificados con algún tipo de Sello Verde que avale el empleo de tecnologías limpias. Sin embargo, existe un aspecto que no es tomado en cuenta: el desperdicio de energía también se presenta debido a que la infraestructura crítica (cableado y tuberías) no se sella de manera adecuada.
“Por esta razón los sistemas de aire acondicionado (factor principal del desperdicio de energía) no son eficientes, ya que presentan fugas a través del paso de cables”, aseveró Alfonso Guarneros, director general de Roxtec México – LATAM. Agregó que hay desperdicio de energía y pérdida de muchísimo dinero (un minuto de pérdida de sus servicios puede costar 7,900 dólares). Pero de igual forma, Guarneros consideró que existen riesgos latentes, “porque un Centro de Datos que no está sellado adecuadamente, se torna muy vulnerable cuando se presentan siniestros; lo grave es que las probabilidades de perder información es muy alta, y claro, sucede la interrupción de servicios de misión crítica (sistemas bancarios, telecomunicaciones, gobierno)”.
A decir del especialista, América Latina no es la excepción: la mayoría de los grandes Datacenters de países como Chile, Colombia, Panamá, Perú y Argentina no están certificados y el sellado de la infraestructura crítica se realiza de manera improvisada. Por el contrario, en Europa, Estados Unidos y en algunos datacenters de la región sí se está empleando esta tecnología.