La falta de profesionales especializados y las amenazas de phishing impulsadas por la Inteligencia Artificial destacan en estos sectores.

A medida que se integran herramientas tecnológicas como ChatGPT para optimizar operaciones en diversos sectores, el aumento de la digitalización trae consigo importantes retos de ciberseguridad. En 2024, la falta de profesionales calificados y las amenazas de phishing impulsadas por la Inteligencia Artificial sobresalen en los sectores de tecnología y salud. En este escenario, la empresa Akamai, proveedora de soluciones para ciberseguridad y servicios en la nube, vislumbra cambios inevitables que requerirán respuestas preventivas.

“Adoptar responsablemente las nuevas tecnologías, entendiendo las vulnerabilidades, es crucial. En nuestras perspectivas, hacemos hincapié en las áreas de tecnología y salud, previniéndolas ante los cambios regulatorios, la falta de profesionales calificados y la creciente sofisticación de los ciberataques”, afirma Helder Ferrão, Gerente de Marketing de Akamai Industries para América Latina. Este escenario de amenazas cibernéticas no solo pone en riesgo la seguridad de los datos corporativos, sino que amenaza directamente la estabilidad financiera de organizaciones y personas.

Tecnología

Incluso con la ayuda de tecnologías avanzadas como la inteligencia artificial (IA) y el aprendizaje automático (ML), las empresas tienen dificultades para encontrar profesionales con los conocimientos adecuados. Como señala Helder Ferrão, “la demanda de profesionales especializados en el área de la seguridad de datos es cada vez mayor, y la colaboración con empresas especializadas o profesionales subcontratados se ha convertido en una estrategia valiosa para cubrir esta necesidad, especialmente en las tareas menos esenciales.”

Los líderes tecnológicos, conocidos como CTO, se enfrentan a cambios significativos en los modelos de negocio de TI. Esto significa que las empresas se están centrando en trabajar con proveedores fiables que puedan ofrecer soporte siempre que sea necesario. 

Akamai también prevé un aumento de dos tipos de ciberataques. Uno es el ataque DDoS, en el que muchos dispositivos trabajan juntos para sobrecargar un sistema, haciéndolo inaccesible. Y el otro tipo de ataque es contra las API, que son como “traductores” que ayudan a que diferentes programas informáticos se entiendan entre sí. Según Ferrão, “es crucial que las organizaciones inviertan en herramientas para detectar y reducir este tipo de ataques, especialmente los dirigidos a sitios web y aplicaciones”.

Además, es necesario que más países creen normas y reglamentos que garanticen la seguridad digital. Esto incluye leyes como la Ley de Resiliencia Operativa Digital (DORA) de la Unión Europea, creada para hacer frente a las nuevas formas de ciberataques, estas medidas son esenciales para proteger los datos en línea y garantizar que Internet siga siendo un lugar seguro.

Salud

La Inteligencia Artificial generativa en salud mejora la forma de trabajar de los profesionales, haciendo que los procesos sean más sencillos y eficientes. Sin embargo, esta evolución también conlleva desafíos; los ciberataques también se vuelven más sofisticados con la IA.

Como señala Ferrão, “proteger nuestros datos es vital, no sólo para mantener la seguridad en línea, sino también para garantizar que todo el mundo pueda acceder a los servicios sanitarios de forma igualitaria”. Comprender los patrones vinculados a las desigualdades sociales puede mejorar significativamente la vida financiera y sanitaria de las personas, especialmente en tiempos difíciles como los que México ha afrontado recientemente.”

Sector financiero

La integración de tecnologías avanzadas está revolucionando el sector financiero y de tarjetas de crédito, buscando facilitar las transacciones y mejorar la experiencia del usuario. Esta evolución no está exenta de desafíos, especialmente en lo que se refiere a la seguridad de los datos.

En el sector financiero, la protección de datos es crucial para asegurar la confianza de los usuarios, garantizando la integridad de las transacciones y la confidencialidad de la información. Ferrão subraya la importancia de este enfoque: “En un mundo en el que las transacciones financieras son cada vez más digitales, la seguridad de los datos es esencial para proteger a los usuarios de posibles fraudes y mantener la estabilidad de los servicios financieros.”

Ante estos retos, tanto las empresas como los usuarios deben adoptar un enfoque proactivo para garantizar la seguridad digital. “Proteger nuestros datos es vital, no sólo para mantener la seguridad en línea, sino también para garantizar que todo el mundo pueda acceder a los servicios financieros de forma justa”, señala Ferrão.

Para mantenerse alerta ante posibles amenazas, las personas deben seguir prácticas sencillas como actualizar las contraseñas con regularidad, activar la autenticación de dos factores y mantenerse informadas sobre los métodos utilizados por los ciberdelincuentes. Además, las empresas deben invertir constantemente en tecnologías de seguridad y formación para sus empleados, construyendo así un entorno digital más seguro para todos.