Tras más de un siglo de historia, el denominado gigante azul, IBM anunció su escisión en dos compañías con el objetivo de descentralizar sus negocios heredados y concentrarse en la especialización de soluciones cloud computing. De este modo, su unidad de servicios TI operará por separado en una nueva empresa, la cual saldrá a bolsa, para finales de 2021.
La compra de Red Hat por 34,000 millones de dólares el año pasado apuntala la nueva estrategia de la multinacional estadounidense, dada a conocer hace unos días por su CEO, Arvind Krishna.
El propio directivo justificó la decisión como un paso natural hacia las nuevas demandas del mercado tecnológico.
“En la década de los 90 escindimos nuestro negocio de redes; en la de los 2000, la unidad de PC (comprada por Lenovo); y hace cinco años, la de semiconductores, porque no formaban parte de nuestra propuesta de valor integral”.
Este “cambio significativo”, tal y como lo calificó Krishna, responde al impacto, cada vez más acelerado, de la nube en las compañías, y a un intento por compensar la ralentización de las ventas de software y la demanda de servidores.
El movimiento, auspiciado por el propio Krishna, que en abril pasado sustituyó a Ginni Rometty como máximo mandatario, le costará a la compañía más de 2,000 millones de dólares y supone un cambio radical en sus operaciones.
No es el único caso en la industria
La escisión no supone una decisión pionera en la industria tecnológica, sino que continúa la senda de hiperespecialización que algunos de los principales competidores de IBM ya habían tomado. Caso paradigmático es el de HP, que hace cinco años descentralizó su unidad de servicios corporativos de TI a HPE, que también acabó vendiendo parte de su negocio, como el área de servicios a CSC, que después dio origen a la actual DXC Tecnology.
José María López, analista principal de IDG Research, defendió este tipo de movimientos, al considerarlos como “una evolución coherente y natural en un mercado en el que ya no tiene sentido ser un fabricante end-to-end. Asistimos a una historia forzada por el curso de los acontecimientos del sector”. Cada vez más compañías optarán por este camino. “Por ejemplo, Microsoft se está encauzando como una compañía pura de servicios”, aseveró.
Por su parte, el también analista de IDG Research, Fernando Maldonado, declaró que es más fácil obtener visibilidad de los márgenes de negocio y ‘atacar’ los mercados importantes. “Las compañías tienden a la nube, y el mercado de infraestructuras se concentrará en unos pocos fabricantes que darán respaldo a estas mismas compañías que venderán cloud computing”, agregó López.
El analista dijo que desde su nacimiento, IBM ha intentado abarcarlo todo, con productos que iban desde el software hasta la electromedicina, pasando por las calculadoras. “En los últimos tiempos, ha centrado su apuesta en la nube, pero arrastraba la herencia histórica del mundo del mainframe”, concluyó López.
IDG.es