Durante 2018, las telecomunicaciones mexicanas se caracterizaron por un marcado dinamismo medido en crecimiento de ingresos, superior al mostrado por más de un lustro. Al cierre del año, se prevé alcance un crecimiento anual de 5.0%, guiado por la recuperación en el dinamismo del segmento móvil, después de la marcada baja de precios en los diversos servicios.
En los últimos años, la entrada y consolidación de nuevos operadores ha resultado disruptiva para el mercado.
Además, las alianzas estratégicas entre competidores, el establecimiento y la modificación de reglas específicas para el operador preponderante en el mercado, entre otros, han generado una aún incompleta dinámica competitiva con impactos positivos en los niveles de precios, calidad de servicio y cobertura.
Conjuntamente, estas circunstancias han generado efectos sobre las condiciones de oferta, hábitos de consumo, reconfiguración de los mercados y la generación de nuevas oportunidades de negocio. En materia de competencia, los resultados han sido contrarios al objetivo de desconcentración de la regulación asimétrica de preponderancia, al incrementar la participación de mercado del agente económico preponderante, América Móvil.
Valor del Mercado en 2018
De acuerdo con estimaciones de The Competitive Intelligence Unit (The CIU), al finalizar 2018, el sector de telecomunicaciones en su conjunto generará 491,198 millones de pesos, lo equivalente a un crecimiento anual de 5.0%, superior al 3.0% alcanzado en 2017.
Para 2019 se pronostica un resultado aún más favorable, con un coeficiente de crecimiento superior a 5.6%, atribuible a la reactivación del mercado de TV de Paga, el crecimiento en el ARPU móvil derivado del mayor consumo de datos móviles, la reducción de la caída de los ingresos fijos y el creciente consumo de servicios de banda ancha, tanto fija como móvil.
Ingresos de Telecomunicaciones
(Miles de millones de pesos)
Crecimiento del Mercado por Segmentos
En su dinámica por segmentos, el de telecomunicaciones fijas registrará una reducción promedio de 6.3% para 2017 y 2018, explicado principalmente por la migración fija a móvil y por la marcada preferencia por el empaquetamiento de la telefonía fija con los servicios de internet y de TV de Paga que favorece la contratación de las ofertas de los operadores convergentes.
En lo que respecta al mercado de TV de Paga, es previsible que continúe con su trayectoria positiva, a pesar de la desaceleración registrada durante 2017 y 2018. Para este año por concluir, el crecimiento se ubicará en la vecindad de 8%, explicado por la masificación de servicios de video y por el creciente consumo de servicios empaquetados. En 2019 se espera que el segmento registra una estabilización e incluso una ligera aceleración, atribuible a la oferta y contratación de paquetes con servicios de valor agregado, como son las plataformas de video bajo demanda por internet o servicios móviles.
Por su parte, el segmento móvil, con una participación cercana a 60% en ingresos, registra un notable dinamismo en términos de valor del mercado, con un crecimiento de anual cercano a 10% durante 2018.
Ello es producto del mayor número de usuarios, tanto de prepago como de postpago, una reducción de la vigencia del saldo en las recargas, la intensificación en el consumo de datos móviles y el marcado aumento en los ingresos de equipos móviles.
En 2019, se pronostica que el segmento siga impulsando la dinámica sectorial, aunque a una menor tasa. La reducción de precios de los servicios móviles seguirá detonando el consumo de datos móviles, circunstancia que se espera que continúe en el mediano plazo.
Ingresos de Telecomunicaciones
(Crecimiento Anual)
Previsiones para 2019
Tras este recuento cuantitativo del sector, se prevé un panorama positivo para 2018 consecuencia de los beneficios generados por la inyección de mayores recursos de infraestructura, así como el aumento en la oferta y consumo de servicios ofrecidos. Es previsible también que continúe la rampa ascendente de crecimiento del sector, derivada de la mayor cobertura de servicios, el despliegue de redes de nueva generación, la profundización en la demanda y consumo de servicios, entre otros factores.
Para 2019, es previsible que resulte en un año de creciente dinamismo para las telecomunicaciones, resultante de los despliegues de infraestructura tanto privados como públicos que se harán en el país, a partir de las licitaciones de espectro radioeléctrico y la materialización efectiva de proyectos de inversión del gobierno entrante, que moldearán la dinámica del sector para los próximos años.
A pesar de esta buena prospectiva, no debe perderse de vista la persistente concentración en ingresos en el sector, tal que alrededor del 60% de los ingresos son atribuibles a un solo operador, el preponderante (América Móvil, Telmex-Telcel) y durante el último año registra mayores niveles de concentración.
Durante 2019, el regulador deberá enfatizar su labor de gestación de la competencia efectiva y no poner frenos ni marcha atrás a los remedios regulatorios para su materialización. El cumplimiento y aplicación efectiva de la regulación asimétrica de preponderancia, es la vía para evitar una eternización del poder de mercado del preponderante y el elevado desbalance en las condiciones de oferta entre operadores.
-Artículo elaborado por The Competitive Intelligence Unit, www.theciu.com